Yolanda Saldívar, la infame asesina de Selena Quintanilla, ha muerto en prisión, según se informó en las primeras horas del día.

La noticia se difundió rápidamente en redes sociales y medios de comunicación, provocando una oleada de reacciones entre los seguidores de la icónica cantante tejana.

Saldívar fue encontrada sin vida a las 6:45 de la mañana en su celda en la prisión de mujeres Mountain View, ubicada en Gatesville, Texas.

A sus 63 años, cumplía una condena de cadena perpetua desde 1995 por el asesinato de Selena.

Las autoridades señalaron inicialmente que la causa de muerte fue un ataque al corazón.

Sin embargo, la falta de un historial médico significativo en Saldívar generó dudas y especulaciones sobre si realmente fue una muerte natural o si había más factores en juego.

En redes sociales, surgieron teorías que iban desde un asesinato encubierto hasta la posibilidad de que Saldívar hubiera fingido su muerte para escapar de la cárcel.

A lo largo de su encarcelamiento, Saldívar enfrentó abusos y amenazas constantes de otras internas, quienes la despreciaban por su crimen.

Incluso, en varias ocasiones, expresó temores sobre su seguridad, afirmando que sentía que su vida corría peligro.

Según informes, en el día de su muerte, había enviado una carta a su abogado, la cual aún no ha sido revelada.

Algunos creen que esta carta podría contener detalles importantes sobre su vida en prisión y el asesinato de Selena.

Tras la difusión de la noticia, los fanáticos de Selena expresaron su alivio, mientras que otros exigían respuestas más claras sobre las circunstancias de la muerte de Saldívar.

Las autoridades han insistido en que no hubo señales de violencia y que se trató de una muerte natural, pero la falta de transparencia ha alimentado aún más las teorías conspirativas en las redes sociales.

La vida de Yolanda Saldívar siempre estuvo rodeada de controversia desde el asesinato de Selena, que marcó un antes y un después en la música tejana y en la comunidad latina.

Saldívar, quien había sido una amiga cercana y la presidenta del club de fans de la cantante, fue condenada por disparar fatalmente a Selena en marzo de 1995.

El crimen conmovió profundamente a sus seguidores, quienes nunca perdonaron a Saldívar por la traición y la muerte de la estrella.

A lo largo de los años, documentales, libros y programas de televisión continuaron explorando los detalles del asesinato y el juicio de Saldívar, manteniendo vivo el interés en la historia.

Sin embargo, su muerte deja preguntas sin respuesta: ¿Fue realmente un caso cerrado? ¿Se llevó secretos a la tumba?

La incertidumbre parece ser un último capítulo en una vida marcada por el escándalo y la tragedia.

La figura de Saldívar ha generado fuertes divisiones entre aquellos que buscan perdón y aquellos que claman justicia por la muerte de Selena.

Mientras tanto, la comunidad de seguidores de la cantante continúa recordándola como un símbolo de esperanza y éxito en la música latina.

Con la muerte de su asesina, muchos se preguntan si finalmente se ha cerrado el ciclo de dolor que comenzó con la pérdida de una de las artistas más queridas de todos los tiempos.