A este punto de la competencia de cocina, los jurados son más exigentes y las reglas se aplican al pie de la letra

El capítulo 98 de Masterchef Celebrity Colombia estuvo marcado por la sorpresa y la controversia.

En un episodio que se presentó como un reto de habilidad y precisión culinaria, tres participantes no reibieron puntos por no cumplir con las normas establecidas, recordando a todos los presentes que, en la competencia, las directrices son inviolables.

La afectación de Juan Pablo Llano, Cony Camelo y Carolina Cuervo dejó una lección importante y puso en evidencia la importancia de seguir al pie de la letra las instrucciones, incluso en un entorno de alta presión y creatividad.

Todo comenzó cuando la producción asignó un reto en torno al curri, para preparar un plato con una rica diversidad de sabores y especias que exige equilibrio en cada ingrediente.

Sin embargo, en esta ocasión, el ingrediente principal del reto no era solo el curri en sí, sino la capacidad de los concursantes para adaptarse a un mercado vegetariano.

La responsabilidad de hacer el mercado recayó en la conductora Claudia Bahamón, quien, en lugar de dejar que los concursantes eligieran sus propios ingredientes, asumió el papel de seleccionar cada elemento, los cuales debían usarse en su totalidad en la preparación final.

La presentadora Claudia Bahamón, quien, en lugar de dejar que los concursantes eligieran sus propios ingredientes, asumió el papel de seleccionar cada elemento, los cuales debían usarse en su totalidad en la preparación final. crédito cortesía Canal RCN

Bahamón, observada a través de una pantalla de televisión por los participantes, tomó decisiones estratégicas al hacer las compras, llenando las canastas de ingredientes frescos y variados.

Al presentarles la selección, se les informó a los concursantes que cada ingrediente debía estar presente en el plato final.

Este requisito era claro y específico, y su omisión resultaría en la descalificación.

La expectativa era alta, y los participantes entendieron que el menor error podría costarles el reto.

El desafío fue complejo para algunos de los famosos.

Cony Camelo, por ejemplo, mostró su frustración y emoción, derramando lágrimas ante la presión de crear un curri digno de los paladares exigentes de los chefs.

Mientras tanto, Vicky Berrío confesó sus dudas sobre cómo lograr un plato que convenciera a los jueces.

No obstante, cada concursante avanzó en su preparación, presentando finalmente su versión de un curri vegetariano.

Uno de los momentos destacados de la jornada fue la presentación de Nina Caicedo, quien se atrevió a innovar con texturas y sabores picantes, incorporando un crocante que sorprendió gratamente a los chefs.

Después de la degustación, y justo antes de que los jurados deliberaran, Claudia Bahamón hizo una pregunta que cambiaría el rumbo de la competencia:

“¿Todos usaron todos los ingredientes?”. Este cuestionamiento, que parecía una formalidad, desencadenó la verdad.

En un acto de honestidad, Cony Camelo, Juan Pablo Llano y Carolina Cuervo admitieron haber omitido un ingrediente en sus platos.

Juan Pablo confesó no haber incluido el ajonjolí, mientras que Cony y Carolina se olvidaron de la pasta vermicelli, un componente importante del mercado seleccionado.

La reacción de los jurados fue inmediata y firme.

El chef Jorge Rausch, uno de los más reconocidos y respetados miembros del jurado, fue contundente en su postura. “Ante todo, las reglas”, declaró, enfatizando que, aunque los tres participantes habían mostrado habilidades culinarias destacadas, el no cumplir con los requisitos del reto implicaba una sanción sin excepciones.

La descalificación de los tres competidores fue inevitable, y con ello, la oportunidad de sumar puntos en el marcador se desvaneció.

Para Cony Camelo, esta decisión fue un golpe inesperado.

Su curry había sido elogiado por los jueces, y sabía que tenía posibilidades de destacar en esta prueba.

Sin embargo, las reglas eran claras, y la omisión de un solo ingrediente la dejó fuera de la competencia en esta ronda.

Carolina Cuervo, por su parte, también comprendió la gravedad de su error desde el momento en que presentó su plato.

Sabía que la omisión del vermicelli sería una falta que los jurados no dejarían pasar.

Juan Pablo Llano, quien mostró una actitud positiva a pesar de la situación, concluyó el episodio con una nota de humor, sugiriendo que deberían otorgarse puntos “por honestidad”.