El drama oculto de Korina Rivadeneira: la enfermedad que la llevó al límite y su desesperado pedido de auxilio
El video, publicado en sus redes sociales, comenzó con un silencio largo, casi insoportable.

Korina, visiblemente afectada, respiró hondo antes de hablar.
Sus ojos hinchados y su voz quebrada no dejaban lugar a dudas: algo grave estaba ocurriendo.
“He tratado de mantenerme fuerte, pero ya no puedo más.
Esto me está ganando.
No sé cómo seguir”, dijo entre sollozos.
En ese momento, millones de personas comenzaron a comentar, enviar mensajes de apoyo y compartir el video que rápidamente se volvió viral.
Durante años, Korina fue símbolo de vitalidad, belleza y optimismo.

Desde su llegada al Perú, conquistó al público con su carisma y su sonrisa, convirtiéndose en una figura constante en la televisión y las redes.
Sin embargo, detrás de esa imagen de éxito se escondía un calvario silencioso que ahora decidió revelar.
Según sus propias palabras, viene padeciendo una enfermedad autoinmune que afecta su sistema nervioso y la deja, por momentos, sin fuerzas para moverse ni respirar con normalidad.
“Al principio creí que era estrés, que mi cuerpo solo me pedía descanso.
Pero luego comencé a sentir que algo no estaba bien.
Los dolores, el cansancio, la ansiedad… todo se volvió insoportable”, confesó.
Su testimonio estremeció a quienes la escuchaban, sobre todo cuando reveló que había pasado noches enteras llorando sin que nadie lo supiera, intentando no preocupar a su familia.
“No quería que Mario (Hart) ni mis hijos me vieran así.
No quería que pensaran que me estaba rindiendo”, añadió con la voz apenas audible.
En el video, Korina explicó que lleva meses sometiéndose a tratamientos médicos y que ha probado todo tipo de terapias alternativas para aliviar el dolor.
Sin embargo, nada parece darle un respiro prolongado.
“Hay días en los que despierto y siento que el cuerpo no me responde.

Me miro al espejo y no reconozco a la mujer que fui.
Me duele admitirlo, pero siento miedo.
”
Sus palabras desencadenaron una ola de preocupación y solidaridad.
Miles de mensajes inundaron sus redes sociales, desde oraciones hasta ofertas de ayuda médica.
Famosos del medio peruano y venezolano también se pronunciaron.
“Fuerza, Kori.
No estás sola”, escribió una presentadora.
“Eres una guerrera, vas a salir de esto”, comentó otra colega.
Pero lo que más conmovió al público fue la sinceridad con la que la modelo habló sobre el costo emocional de su enfermedad.
“No es solo el dolor físico.
Es la impotencia, la frustración, el sentir que tu cuerpo te traiciona.
He llegado a pensar que no puedo más.
Pero sé que tengo que seguir, por mis hijos, por los que amo.
”
En otro fragmento del video, Korina se dirigió directamente a sus seguidores, pidiendo algo que sorprendió a todos: “No les pido dinero ni regalos.
Solo recen por mí.
Necesito energía, necesito fe.
Siento que la estoy perdiendo.
” Sus lágrimas corrieron sin control mientras pronunciaba esas palabras, y por un momento, la mujer que siempre mostró fortaleza se convirtió en el reflejo de una batalla silenciosa que miles de personas libran cada día sin que nadie lo note.
Fuentes cercanas a la pareja confirmaron que Mario Hart ha estado acompañándola en todo momento.
“Está destrozado, pero firme.
No se despega de ella ni un segundo”, comentó un amigo cercano.
Según esa fuente, Korina ha tenido episodios en los que su salud se complica repentinamente, obligándola a suspender compromisos profesionales y apariciones públicas.
Mientras tanto, los médicos que la atienden habrían recomendado mantener reposo absoluto y evitar situaciones de estrés.
Sin embargo, la modelo confesó que el aspecto emocional es lo más difícil de controlar.
“Yo siempre fui energía pura, me encantaba trabajar, correr, reír.
Ahora me cuesta hasta levantarme de la cama.
Es como si mi cuerpo se apagara poco a poco.
La confesión ha generado también una reflexión colectiva sobre la salud mental y física en el mundo del espectáculo.
Muchos se preguntan cuántas figuras públicas sufren en silencio mientras mantienen una sonrisa ante las cámaras.
“A veces uno cree que las personas que están en televisión lo tienen todo, pero no sabemos la carga que llevan”, escribió un usuario.
Al cierre del video, Korina prometió seguir luchando.
“No quiero rendirme.Sé que hay una razón para todo esto.
Tal vez esta enfermedad vino para enseñarme algo, para que valore la vida de otra manera.
Pero necesito fuerza.Necesito no sentirme sola.Desde entonces, miles de seguidores han convertido su perfil en un espacio de esperanza.
Cada comentario, cada mensaje de apoyo, es un recordatorio de que no está sola en esta lucha.
Y aunque su futuro médico aún es incierto, una cosa ha quedado clara: detrás de la belleza y la fama, hay una mujer que enfrenta con valentía una batalla real, sin guiones, sin luces, sin filtros.
Korina Rivadeneira, la guerrera de sonrisa eterna, hoy muestra sus heridas al mundo.
Y aunque dice que “no puede más”, su voz, quebrada pero firme, demuestra lo contrario: que todavía le queda la fuerza más poderosa de todas… la del corazón que se niega a rendirse.