🔥 Altafulla y la Jugada Más Polémica: ¿Está Usando a Dios para Manipular al Público y Ganar “La Casa de los Famosos”?
La competencia en “La Casa de los Famosos” ha alcanzado niveles de tensión sin precedentes, y uno de los nombres que más está dando de qué hablar es el de Altafulla.

Con un perfil aparentemente espiritual, lleno de mensajes positivos, reflexiones y rezos diarios frente a las cámaras, ha logrado cautivar a parte de la audiencia… pero también despertar sospechas de un juego más oscuro y estratégico de lo que parece.
¿Es realmente un hombre de fe o un maestro del reality que ha encontrado en la religión su mejor herramienta?
Desde sus primeras semanas en la casa, Altafulla comenzó a destacarse por su actitud pacífica, sus constantes agradecimientos a Dios y su insistencia en llevar una “energía limpia” al ambiente.
En un principio, estas actitudes fueron aplaudidas por muchos que vieron en él un “contrapeso espiritual” ante los dramas habituales del programa.

Pero con el paso de los días, su postura fue volviéndose cada vez más intensa… y más incómoda para varios compañeros y seguidores.
Lo que encendió la mecha fue un episodio reciente, transmitido en horario estelar, donde Altafulla, entre lágrimas, pidió a Dios que lo ayudara a “tocar el corazón del público” para seguir en competencia.
“Señor, Tú me trajiste aquí, y si es Tu voluntad, haz que ellos me salven”, dijo mientras sus compañeros lo miraban con incomodidad y el público estallaba en redes.
¿Oración o manipulación emocional? Esa es la pregunta que ha dividido a millones de televidentes.
Algunos internautas acusan al concursante de usar el nombre de Dios como escudo para no ser criticado, y como herramienta emocional para ganar votos.
“No se vale jugar con la fe de la gente para quedarse en un show”, comentó un usuario en TikTok.

Otros han ido más lejos, señalando que Altafulla solo intensifica sus rezos cuando está nominado, pero guarda silencio espiritual cuando se siente seguro.
¿Coincidencia? ¿O cálculo?
Dentro de la casa, varios compañeros han comenzado a sospechar de sus intenciones.
Aunque nadie lo ha confrontado directamente, algunas conversaciones captadas por micrófonos abiertos muestran a otros famosos cuestionando su autenticidad.
“A mí me parece raro que siempre saca el tema de Dios cuando las cámaras están más encima”, dijo una de las participantes en voz baja.
El comentario ha sido replicado en redes como prueba de que, incluso dentro del show, hay quienes ya no creen en su sinceridad.
Los productores, por su parte, han optado por mantenerse al margen, argumentando que los participantes son libres de expresarse como deseen.
Sin embargo, el tema ya está generando ruido incluso entre figuras religiosas, que han comenzado a opinar en medios y redes sobre los “riesgos de usar la fe como espectáculo”.
Un pastor evangélico muy conocido en Latinoamérica expresó: “La oración es sagrada.
Usarla para influir en un voto popular en un reality, es cruzar una línea peligrosa”.
Altafulla, al parecer, no se inmuta.
En sus últimas apariciones, ha seguido hablando abiertamente de su conexión con Dios y de cómo la espiritualidad guía cada una de sus decisiones dentro de la casa.
Para sus seguidores más fieles, es un ejemplo de coherencia y valentía espiritual.
Para sus detractores, es el mejor actor del programa, y su guión se basa en un personaje que no existe fuera del show.
¿La fe de Altafulla es real? ¿O estamos presenciando una estrategia perfectamente elaborada para ganarse al público más emocional? La línea entre lo auténtico y lo calculado se vuelve cada vez más difusa, y con cada gala de eliminación, su papel dentro del programa parece ganar más fuerza… y más controversia.
Porque si algo ha demostrado esta temporada, es que en “La Casa de los Famosos”, hasta Dios puede ser parte del juego.