La actitud SOSPECHOSA de la mejor amiga de Valeria Márquez que encendió todas las alarmas.
¿Qué está ocultando?
Cuando se supo de la muerte de Valeria Márquez, el impacto fue inmediato.
No solo por su repentina partida, sino por todo lo que rodeaba su vida personal: sus rituales con la Santa Muerte, las extrañas actividades en su salón, y los rumores de pactos con fuerzas que pocos se atreven a nombrar.
Pero en medio de ese caos mediático y emocional, hubo alguien que se mantuvo al margen, tranquila, casi indiferente: su mejor amiga.
Durante días, esa mujer – cuyo nombre no ha sido revelado públicamente – fue vista en múltiples entrevistas, llorando ante las cámaras, hablando con naturalidad sobre Valeria y cómo la había marcado su pérdida.
Pero fue en una transmisión en vivo, grabada apenas horas después del fallecimiento, donde se captó un detalle que nadie notó al principio.
Mientras respondía una pregunta aparentemente inocente sobre los últimos días de Valeria, la amiga hizo una señal extraña con la mano.
Un gesto sutil, rápido, casi imperceptible.
Pero usuarios en redes sociales, atentos a cada movimiento, comenzaron a comparar ese gesto con símbolos usados en rituales ocultistas.
Y lo más inquietante: ese mismo gesto aparece en antiguos manuales de invocación relacionados con la Santa Muerte.
Las teorías no tardaron en estallar.
Algunos aseguran que fue una señal de protección, como si intentara alejar algo que aún la rodeaba.
Otros creen que fue un código, un aviso, una especie de mensaje oculto para quienes sabían cómo interpretarlo.
Pero hay quienes van más allá: creen que la amiga estaba involucrada directa o indirectamente en los rituales de Valeria, y que ese gesto fue parte de un pacto que aún sigue vigente.
Lo que refuerza estas teorías es el comportamiento que tuvo después.
En vez de desaparecer del ojo público como la mayoría de los allegados que desean privacidad, ella comenzó a aparecer cada vez más.
Publicó fotos con frases enigmáticas, compartió recuerdos acompañados de emojis que muchos interpretaron como simbología oculta, y hasta realizó transmisiones en vivo desde el salón donde Valeria realizaba sus rituales, asegurando que “ahí se siente una energía especial”.
Un testigo que estuvo presente durante una de esas transmisiones afirmó haber visto velas negras encendidas en una esquina del salón, justo donde Valeria colocaba su altar.
Y aunque ella lo negó todo, las imágenes captadas por el directo dejaron poco a la imaginación.
A medida que los días pasaban, más y más personas comenzaron a vincular a esta amiga con situaciones extrañas ocurridas después de la muerte de Valeria.
Ruidos en la casa, objetos moviéndose solos, voces captadas en grabaciones, y lo más aterrador: una fotografía donde se ve a la amiga con una sombra alargada detrás, a pesar de que estaba sola.
¿Podría ser que Valeria le haya confiado secretos que solo ella conocía? ¿O tal vez ambas estaban involucradas en algo que escapó de control? Lo cierto es que el silencio se volvió su mejor escudo.
A pesar de las preguntas, las acusaciones y los mensajes que inundan sus redes, ella se ha mantenido firme: sin negar del todo, pero tampoco admitiendo nada.
Simplemente repite que “hay cosas que no se pueden explicar”.
Expertos en lenguaje corporal que analizaron la señal aseguran que no fue un movimiento casual.
La forma, la intención y el momento exacto en que lo hizo indican claramente que tenía un propósito.
Y cuando se combina esto con el historial de Valeria y su conexión con prácticas esotéricas, el resultado es una tormenta perfecta de sospechas.
Hoy, la amiga de Valeria Márquez está en el centro de una controversia que crece como una bola de nieve.
Y mientras ella sigue publicando mensajes cada vez más crípticos, muchos se preguntan: ¿estamos ante alguien que sabe mucho más de lo que dice? ¿Qué significó realmente esa señal? ¿Y por qué, desde que la hizo, tantos aseguran escuchar la voz de Valeria susurrando en la oscuridad?
Una cosa es segura: esta historia está lejos de terminar.
Y mientras el misterio sigue sin resolverse, el miedo se instala cada vez más profundamente en quienes alguna vez pensaron que conocían a Valeria.
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y a quienes la rodeaban.