😢 “No hay dolor más grande”: Ernesto Pimentel relata el episodio más devastador de su vida
Ernesto Pimentel siempre ha sido un símbolo de alegría, color y espectáculo.
Su personaje “La Chola Chabuca” ha sido durante décadas uno de los rostros más icónicos de la televisión peruana.

Pero detrás de esa imagen vibrante, se escondía un dolor imposible de imaginar.
Esta semana, en una entrevista íntima y completamente inesperada, Ernesto decidió abrir su corazón… y lo que confesó estremeció a todo el país.
Con voz quebrada y lágrimas contenidas, el artista reveló que años atrás vivió el momento más doloroso de su vida: la pérdida de su bebé.
“Nunca lo había dicho públicamente… no estaba preparado.
Pero ya no quiero callarlo más.
Porque ese dolor ha sido parte de mí desde entonces”, comenzó diciendo.
Nadie, ni siquiera sus compañeros de programa o amigos más cercanos, sabían que había pasado por un episodio tan devastador.

Según relató, la tragedia ocurrió durante un proceso de gestación por subrogación, al cual él se había entregado con ilusión y esperanza.
“Soñaba con ser padre, con tener en mis brazos a ese ser que ya sentía parte de mi alma.
Lo preparé todo.
Cada detalle.
Pero de pronto, la vida me lo arrebató sin explicaciones.
El embarazo, según explicó, avanzaba con normalidad hasta que una complicación médica inesperada cambió el rumbo por completo.
“Recibí una llamada a la madrugada.
Me dijeron que había una emergencia, que no sabían si el bebé sobreviviría.
Corrí con el corazón en la garganta… pero llegué tarde.
” La escena que describió a continuación dejó helado a todo el público.
“Lo vi… era tan pequeño, tan perfecto… pero ya no respiraba.
Nunca había sentido un vacío tan grande.
Ernesto confesó que cayó en una depresión profunda tras ese momento.
“Dejé de comer.
Dejé de reír.
Me escondía detrás del maquillaje, del personaje, pero por dentro solo quería desaparecer.
” Dijo que incluso pensó en dejar la televisión, en alejarse de todo lo que le recordara la ilusión perdida.
“Miraba los estudios, los aplausos… y solo pensaba en lo que nunca llegaría a vivir.
Sin embargo, también compartió que con el tiempo —y con terapia, familia y fe— logró transformar ese dolor en fuerza.
“Nunca lo olvidé.
Nunca lo superaré.
Pero aprendí a vivir con esa ausencia, a hablar de él como un ángel que me acompaña.
” Pimentel aseguró que, aunque ha seguido con su vida profesional, ese episodio marcó un antes y un después.
“Ya no soy el mismo Ernesto.
Y tal vez eso sea lo más honesto que puedo decir hoy.
”
La entrevista, que rápidamente se volvió viral, generó una ola de reacciones.
Famosos, colegas y miles de seguidores inundaron las redes sociales con mensajes de apoyo, amor y respeto.
Muchos destacaron su valentía al hablar de un tema tan íntimo y doloroso, y al mismo tiempo, visibilizar una experiencia que muchos padres atraviesan en silencio.
“Gracias por mostrar que los hombres también lloran, que los artistas también sufren, y que el duelo de un padre es tan real como cualquier otro”, escribió una usuaria que también perdió a su bebé.
Hoy, Ernesto Pimentel no solo es el hombre detrás del personaje que todos aman.
Es también un padre herido, un corazón resiliente, un testimonio vivo de que detrás de cada sonrisa puede existir un mundo de dolor que solo ahora se empieza a entender.
Y aunque la vida le arrancó un pedazo de alma, su valentía al compartir esta historia ha unido a miles en un mismo sentimiento: el del amor eterno que un padre puede tener… por un hijo que partió sin haber llegado.