📺 “Con Leslie sí te enfrentas, pero con la justicia te escondes”: La Urraca pulveriza a Marisol en vivo 🧨🙊
Todo comenzó con un video que rápidamente se hizo viral: Marisol, la autoproclamada “Faraona de la cumbia”, enfrascada en una acalorada discusión con Leslie, otra figura potente del mundo del espectáculo.

El intercambio fue intenso, directo y sin censura.
Gritos, gestos de desprecio y frases que claramente no estaban en el guion.
El país entero se dividió entre “Team Leslie” y “Team Marisol”, pero mientras la polémica subía de temperatura, Magaly Medina observaba…en silencio.Hasta ahora.
En su programa, frente a una audiencia que ya sabía que se venía algo fuerte, Magaly no esperó ni cinco minutos para comenzar el descuartizamiento en vivo.
Primero, mostró los clips de la pelea con Leslie.
Luego, como quien afila un cuchillo, lanzó la frase que reventó las redes: “Mírala, qué valiente.
Así nos hubiera gustado verla…pero en el juzgado, rindiendo cuentas y no escondiéndose como suele hacer. ”
La frase cayó como una bomba.
El público en el set enmudeció por unos segundos, y luego vino la ola: risas nerviosas,
murmullos, y un rostro de Magaly que no mostraba ni una pizca de arrepentimiento.
No se trataba solo de un comentario venenoso.
Era una acusación directa.Un pase de factura.
Y, sobre todo, una humillación pública sin retorno.
“Porque claro, con Leslie sí levantas la voz, sí das la cara, sí gritas.
Pero cuando se trata de la justicia, de responder por las cosas que has hecho o dejado de hacer, ahí sí no se te ve, ahí sí desapareces”, continuó la conductora, dejando en claro que su bronca no era nueva ni superficial.
“Esto no es empoderamiento femenino, esto es show barato.
Y Marisol debería aprender a distinguir una cosa de la otra.
La crítica no paró ahí.
Magaly recordó —con lujo de detalles— las veces que Marisol fue citada por temas legales y no asistió, las evasivas ante reporteros, y la aparente doble cara que muestra según el escenario en el que se encuentre.

“Una cosa es cantar, otra es enfrentar la realidad.
Y cuando hay que hablar de demandas, de procesos, de justicia, ahí la Faraona se convierte en esfinge…muda, inmóvil, ausente.
Las redes estallaron.
“Magaly le dijo lo que nadie se atrevía”, comentaban algunos.
Otros, más críticos, consideraron que el ataque fue excesivo y oportunista.
Sin embargo, lo que nadie pudo negar fue el impacto: la imagen de Marisol quedó expuesta, no por su pelea con Leslie, sino por lo que Magaly insinuó detrás de ella.
Marisol, por su parte, no ha respondido oficialmente.
Pero fuentes cercanas aseguran que está “molesta y dolida” por el ataque, y que estaría evaluando responder en sus propias redes sociales o incluso en entrevistas exclusivas.
El silencio, al menos por ahora, parece ser su única defensa.
Pero la pregunta que todos se hacen es: ¿por qué Magaly eligió este momento para estallar? ¿Fue solo una reacción espontánea o parte de una estrategia mayor para desestabilizar figuras públicas que considera “doble cara”? Conociendo su estilo, no sería raro que esto sea solo el comienzo de una campaña más amplia.
Lo cierto es que, una vez más, Magaly se coloca en el centro de la conversación mediática con una mezcla explosiva de verdades incómodas, ironía implacable y timing perfecto.
Su ataque a Marisol no fue solo un comentario más.
Fue una sentencia pública, una exhibición de poder…y un recordatorio brutal de por qué sigue siendo la reina indiscutible del espectáculo peruano.
Ahora, todo el país espera: ¿responderá Marisol o guardará silencio? ¿Seguirá la pelea con Leslie o se abrirá una nueva batalla con Magaly? Lo único claro es que, en este juego de reinas, las coronas se tambalean…y las palabras, cuando vienen de la Urraca, pueden cortar más que una espada.