Santiago Abascal encabezó un acto multitudinario en Zaragoza, denunciando la corrupción del Gobierno de Pedro Sánchez y posicionando a VOX como alternativa política ante los ciudadanos.

Santiago Abascal, líder de VOX, protagonizó ayer un acto multitudinario en Zaragoza, donde reunió a miles de simpatizantes en un evento que la organización calificó como histórico.
Durante más de dos horas, Abascal lanzó un discurso vehemente contra el Gobierno de Pedro Sánchez, denunciando lo que calificó como corrupción, traición y manipulación de las instituciones.
“No se les puede obligar a elegir entre la mafia de los corruptos y la estafa de aquellos que hacen como que discuten pero que en Bruselas pactan todo”, afirmó el dirigente, recibiendo vítores de los asistentes.
El evento, que superó ampliamente la capacidad del recinto, reflejó la fuerza de VOX en Aragón y el impacto que estos actos tienen en la percepción pública del partido.
Abascal subrayó la importancia de la participación ciudadana, especialmente de los jóvenes, instándolos a presionar a sus familias para apoyar la alternativa política que representa VOX.
“Quiero daros las gracias con una reiteración viva y enviar un encargo especialmente a los jóvenes: hablad con vuestros mayores y pedidles un cambio”, declaró, en un llamamiento directo a la movilización electoral.

En su intervención, el líder de VOX enfatizó la necesidad de seguridad y soberanía para España.
Denunció lo que consideró una pérdida de control sobre políticas fundamentales que afectan a los ciudadanos, subrayando la delegación de competencias clave a instituciones europeas sin consultas ni referéndums.
“Hoy las políticas que más nos afectan se deciden lejos de nosotros. Soberanía significa que no se la regalen a terceros”, afirmó, criticando la influencia de Bruselas en cuestiones de inmigración, energía y seguridad.
Abascal no escatimó en críticas al gobierno central, acusándolo de favorecer políticas que, según él, han llevado al aumento de la delincuencia y a la inseguridad en las calles.
Recordó casos recientes de violencia y delitos cometidos en zonas urbanas, planteando que la protección de los ciudadanos debería ser una prioridad.
“Hombre, no volveremos a eso de dejar las puertas abiertas sin cerrarlas, pero una niña de 14 años en un parque de Madrid prácticamente a plena luz del día… hay una diferencia abismal”, ejemplificó, enfatizando su postura sobre seguridad ciudadana.

El líder de VOX también abordó la cuestión económica, defendiendo la necesidad de una política que incentive la prosperidad del país y proteja a sectores estratégicos como la agricultura y la industria.
“Queremos libertad para poder emprender y prosperar sin impuestos abusivos que no se utilizan para mejorar la vida de los españoles”, subrayó, vinculando la política económica con la defensa de la soberanía nacional y la dignidad de los ciudadanos.
En el plano social, Abascal criticó lo que considera políticas educativas y de género ideologizadas, que según él, afectan la libertad de elección de las familias y la educación de los hijos.
“Queremos políticas de libertad para educar a nuestros hijos sin que vengan los fanáticos del género a corromperlos desde la más temprana edad”, sentenció, generando aplausos entre los asistentes, que coreaban consignas a favor del partido.
Durante su intervención, Abascal hizo hincapié en la unidad de VOX como alternativa política frente a lo que denomina “la mafia y la estafa”, refiriéndose al bipartidismo y la gestión del Gobierno de Sánchez.
Destacó que la movilización ciudadana es clave para cambiar el rumbo del país y consolidar la presencia del partido en las instituciones.
“Estamos desbordando todos los actos de los patriotas para decir que España necesita un cambio urgente”, afirmó, vinculando la asistencia masiva al acto con la legitimidad del mensaje del partido.

El líder también criticó lo que considera un manejo ineficiente de la memoria histórica y la utilización política de los actos institucionales, incluyendo el desfile del 12 de octubre y las celebraciones relacionadas con la monarquía.
Aseguró que VOX no comparte tribunas con gobiernos que, según él, han dejado de lado a los ciudadanos.
“Por primera vez decidimos que no compartíamos tribuna y eso refleja nuestra independencia frente a quienes priorizan su agenda política”, explicó, destacando la coherencia del partido con sus principios.
Finalmente, Abascal cerró su discurso reafirmando la identidad de VOX como un partido que defiende a los españoles, sus libertades y su futuro económico y social. “Sabemos lo que queréis y sabemos lo que queremos.
No vamos a dar ni un paso atrás en la defensa de estas condiciones”, concluyó, seguido por el himno nacional, que marcó el cierre del acto entre aplausos y banderas ondeando en Zaragoza.
El evento refleja el creciente protagonismo de VOX en el panorama político español y su estrategia de movilización a través de actos multitudinarios que combinan denuncia política, propuestas de soberanía nacional y mensajes directos a los ciudadanos.
La capacidad de convocatoria y la intensidad del discurso de Abascal subrayan la relevancia del partido como fuerza política alternativa y su influencia potencial en los próximos procesos electorales.
