La polémica ha estallado con fuerza en RTVE después de que la histórica periodista Carmen Sastre haya destapado lo que muchos ya sospechaban: Xabier Fortes ha colocado a su hijo en la cadena pública mientras sigue presumiendo de transparencia y de lucha contra el “clientelismo”
La tensión en RTVE ha alcanzado un nuevo pico tras las acusaciones de la periodista Carmen Sastre contra el presentador Xabier Fortes, quien, según Sastre, ha colocado a su hijo en la cadena pública mientras critica el clientelismo.
La polémica se desató cuando Sastre publicó en la red social X una imagen del hijo de Fortes trabajando como reportero en el Canal 24 Horas. Acompañando la imagen, Sastre escribió: “El hijo de @xabierfortes ya está colocado en TVE. Aquí en un directo en el canal 24 horas.
Me dicen que está contratado hasta que salga la oposición (le da puntos). Curioso que tenga colocado al hijo quien criticaba las familias en TVE. Yo no coloqué a mi hija cuando era directiva”.
La revelación provocó un gran revuelo, tanto dentro como fuera de RTVE, y las críticas hacia Fortes no tardaron en llegar.
En respuesta a la controversia, Fortes se mostró visiblemente molesto y publicó un mensaje en su perfil de X, donde agradeció a sus seguidores: “Fin de semana. Se agradece, después de estos días de tanto trabajo… y de tanto trajín.
Millones de gracias a los más de dos millones de personas que han visualizado la respuesta a @Carmensastre12 tras su ataque contra mi hijo por el simple hecho de llevar mi apellido”.
Sin embargo, sus palabras no lograron calmar la situación; por el contrario, Fortes adoptó un tono victimista, afirmando:
“Es muy difícil de entender cómo una persona (que además se declara cristiana) puede odiar tanto para meterse con un becario… solo para hacerle daño a su padre. Si quieres desahogarte, hazlo conmigo”.
Carmen Sastre, lejos de dejarse intimidar, respondió con firmeza, dejando a Fortes en una posición comprometida. “Decir la realidad es informar.
Atacar era ir a los medios de la competencia con falsedades a desprestigiar a nuestra dirección líder. Para manejar RTVE a vuestro antojo.
¿Te acuerdas de tus críticas a 11 contratados a los que llamasteis ‘paralelos’? Y los viernes negros”, replicó Sastre, evidenciando la hipocresía en las críticas de Fortes sobre el nepotismo.
Con esta afirmación, Sastre no solo defendió su postura, sino que también resaltó la doble moral de Fortes, quien ha señalado a otros por prácticas similares.
La intervención de Sastre resonó en las redes sociales, donde numerosos profesionales de los medios y espectadores expresaron su apoyo a la periodista.
Entre los respaldos más destacados se encuentra el del escritor Arturo Pérez-Reverte, quien no dudó en manifestar públicamente su apoyo a Sastre, intensificando aún más la presión sobre Fortes.
La situación ha puesto en evidencia las tensiones internas en RTVE y ha alimentado la percepción de que algunos perfiles vinculados al Gobierno han manipulado la cadena pública “a su antojo”, como ha criticado Sastre.
Este escándalo ha abierto un debate más amplio sobre el nepotismo y el favoritismo en los medios de comunicación, así como sobre la credibilidad de RTVE bajo la influencia de Fortes.
La imagen del presentador, que anteriormente acusaba a otros de prácticas poco éticas, se ha visto gravemente afectada.
La situación se ha convertido en un claro ejemplo de cómo las dinámicas de poder y las relaciones personales pueden influir en la ética profesional dentro de los medios.
La controversia ha llevado a un análisis más profundo sobre la política y la gestión de RTVE.
La percepción de que la cadena pública ha sido utilizada como un instrumento al servicio de intereses políticos ha generado desconfianza entre el público y ha cuestionado la independencia de la institución.
Las palabras de Sastre, al señalar las contradicciones en las críticas de Fortes, subrayan una preocupación más amplia sobre la transparencia y la ética en la gestión de los medios públicos.
A medida que la polémica continúa, la presión sobre Fortes y RTVE parece aumentar.
La situación no solo ha puesto en tela de juicio la credibilidad del presentador, sino que también ha reavivado el debate sobre la necesidad de una mayor transparencia y responsabilidad en la gestión de los medios de comunicación públicos.
Con figuras políticas y líderes de opinión tomando partido, el futuro de RTVE y su reputación se encuentra en un momento crítico.
La controversia entre Carmen Sastre y Xabier Fortes es un recordatorio de que la ética en los medios de comunicación es fundamental para mantener la confianza del público.
A medida que los acontecimientos se desarrollan, el ojo público estará atento a cómo RTVE maneja esta situación y si se implementarán cambios para garantizar una mayor transparencia y ética en el futuro.
