Muere de forma repentina Pedro Cadahía, prometido de la influencer Manuela Ochoa Gómez-Acebo, apenas cinco días después de haberle pedido matrimonio en México y con la boda ya fijada.

La felicidad se convirtió en duelo en cuestión de días.
La influencer Manuela Ochoa Gómez-Acebo atraviesa uno de los momentos más devastadores de su vida tras la muerte repentina de su novio y prometido, Pedro Cadahía, ocurrida el domingo 21 de diciembre, apenas cinco días después de que él le pidiera matrimonio.
Una historia de amor que parecía imparable, con boda ya fijada y un futuro compartido cuidadosamente planeado, se ha visto truncada de forma inesperada, dejando a familiares, amigos y seguidores sumidos en la incredulidad y el dolor.
La noticia fue comunicada por la propia Manuela a través de su perfil de Instagram, donde reúne a más de 55.000 seguidores.
Lejos de un comunicado frío, la joven eligió despedirse públicamente con una carta cargada de emoción, fe y amor, un texto que rápidamente se volvió viral por la intensidad de sus palabras y por la crudeza del golpe que relata.
“Un 8 de diciembre prometimos querernos todos los días de nuestra vida frente a nuestra Virgen de Guadalupe en su casa en México. El 12 de diciembre, en su día, decide llevarte al cielo sin preaviso”, escribió, situando el compromiso en un viaje muy especial para ambos.
México había sido el escenario elegido por Pedro para pedirle matrimonio a Manuela. La pareja se encontraba allí con motivo de la boda de una amiga, y en ese contexto, él decidió arrodillarse y sellar una promesa que, para los dos, era definitiva.
Tanto es así que la fecha del enlace ya estaba cerrada: el 31 de octubre del año siguiente. Invitaciones, lista de invitados y sueños compartidos formaban parte de un proyecto de vida que parecía firme y lleno de ilusión.
En su mensaje, Manuela describe a Pedro como una persona excepcional, alguien cuya forma de amar marcó profundamente a todos los que lo conocieron. “Hay gente que es tan tan santa que no está hecha para este mundo.
Y tú, mi amor, eres sin duda de esas personas. Qué suerte el cielo de recibir un ángel como tú”, continúa la influencer, acompañando sus palabras con un carrusel de imágenes que recorre momentos íntimos de la pareja, viajes, sonrisas y gestos de complicidad.

La carta no oculta la desorientación y el vacío que deja la pérdida.
“¿Qué voy a hacer sin ti? Si te soy sincera, no lo sé. Reconozco que todo esto me viene un poco grande, no sé cómo vivir sin ti”, confiesa Manuela, poniendo voz a un sentimiento que muchos identifican como el más duro de todos:
el de aprender a seguir cuando el futuro imaginado desaparece de golpe.
Aun así, la joven insiste en que la promesa hecha días antes sigue viva, ahora de otra manera: “Lo que sí sé es que hoy esa promesa brilla en el cielo más que nunca”.
Uno de los fragmentos que más ha emocionado a sus seguidores es aquel en el que Manuela recuerda un mensaje que Pedro le escribió un año atrás.
“Si al cielo se llega amando, llego seguro porque no sabes lo que te quiero”, citó ella, convencida de que ese amor fue la respuesta a todo lo ocurrido.
“Tengo tan claro que has llegado tan directo porque era imposible querer más que como lo hacías tú”, añadió, reforzando la idea de que el vínculo entre ambos trasciende ahora lo terrenal.
El impacto de la noticia ha sido enorme también entre familiares y amigos. Manuela agradece las innumerables muestras de cariño recibidas y destaca la huella que Pedro dejó en quienes le rodeaban.
“Y si hubieras visto la de gente que ha venido a despedirte… te habrías muerto de vergüenza”, escribe con un toque de humor lleno de ternura.
“Pero sabías querer tanto y tan bien, que ha sido precioso”. En otro momento, bromea sobre la lista de invitados de la boda: “Ahora entiendo cómo te salían 270 invitados para la boda, ¡pocos me parecen!”.

Lejos de recrearse únicamente en el dolor, la influencer también habla de una decisión firme: seguir adelante por los dos.
“Ahora me toca vivir por dos, me toca seguir adelante por ti, por nosotros, y prometo hacerlo como siempre lo hacíamos”, afirma, mostrando una fortaleza que ha sido muy aplaudida por su comunidad.
En sus palabras se percibe una mezcla de tristeza profunda y determinación, una manera de honrar la memoria de Pedro a través de la vida que continúe.
Manuela no ha querido ofrecer detalles sobre las circunstancias del fallecimiento. Su prioridad, según deja claro, ha sido despedirse de su compañero de vida y agradecer el apoyo recibido.
“No sabes la que has liado aquí abajo, la de gente que está rezando por ti; gracias por mandarme tantísimos abrazos a través de toda la gente que adoramos”, escribe, cerrando el texto con una declaración que resume todo lo vivido:
“Saber que me iba a casar contigo es lo más duro, pero lo más bonito que me ha pasado nunca. Te quiero tanto hoy y siempre”.
Tras este mensaje, la joven ha decidido pausar su actividad en redes sociales, un gesto comprensible ante la magnitud de la pérdida.
Mientras tanto, miles de seguidores continúan inundando sus publicaciones con mensajes de apoyo, condolencias y cariño, convirtiendo su perfil en un espacio colectivo de despedida y acompañamiento.
La historia de Manuela y Pedro, marcada por un amor intenso y una despedida inesperada, ha dejado una profunda huella emocional y se ha convertido en uno de los relatos más conmovedores de los últimos días en el universo digital.
