La hija de Ortega Cano es una chica muy familiar y si hay algo que le pesa en el concurso es acordarse de sus seres queridos.
Desde su llegada a ‘Supervivientes All Stars 2025’, Gloria Camila ha demostrado ser una de las concursantes más familiares y sensibles del reality.
La hija de Ortega Cano, siempre sonriente ante las cámaras, vive un torbellino de emociones lejos de su entorno más cercano, donde la nostalgia y la preocupación por los suyos marcan cada uno de sus días en los Cayos Cochinos.
En sus últimos encuentros con la cámara y sus compañeros, la joven no ha podido ocultar la profunda tristeza que le provoca estar separada de quienes más quiere.
“Son muchas horas para darle al coco”, confesaba a Jessica Bueno mientras contemplaban las estrellas desde la playa.
“Es como no saber de Álvaro, no sé qué tal estará, si se acordará de mí, si le estará gustando cómo me estoy defendiendo en el concurso… todo esto me preocupa cada día”.
Sus palabras dejaban entrever que, más allá del juego y la supervivencia, la incertidumbre sobre sus relaciones personales pesa en su ánimo.
Sin embargo, la nostalgia no solo alcanza a los vivos. La muerte de María, conocida como Michu, la ex pareja de José Fernando y madre de su sobrina, sigue siendo un dolor muy presente para Gloria.
“Echo mucho de menos a María… me acuerdo muchísimo de ella”, confesaba con lágrimas contenidas.
La joven falleció a los 33 años víctima de una enfermedad cardiaca, y su pérdida aún resuena en el corazón de la familia Ortega y de la propia Gloria Camila.
“Sé que estaría apoyándome en este concurso… y me duele no tenerla cerca para compartir esto”, añadía con voz entrecortada, mostrando que el duelo sigue siendo una constante en su vida diaria, incluso mientras lucha por mantenerse en el reality.
La joven también reflexionó sobre la relación con sus hermanos, revelando que la distancia y las pequeñas fricciones familiares hacen que la separación de la familia se sienta aún más intensa.
“Tengo un hermano cinco años mayor que yo, pero es como que no nos hacemos caso… damos por hecho que siempre estaremos ahí y luego nos damos cuenta de que los momentos juntos son pocos”.
Entre sus confesiones, también mencionó a su hermano pequeño y la importancia de los lazos familiares en los que ahora encuentra su apoyo emocional.
El día a día de Gloria Camila en la isla combina retos físicos con una constante carga emocional. A pesar de los momentos de diversión y estrategia que exige el programa, la joven se mantiene reflexiva y cercana a sus compañeros.
“Yo hablo mucho con Jose… porque sé que, al final, solo nos vamos a tener él y yo. Con mi hermano pequeño igual… tenemos que valorar cada momento”, relataba mientras recogía leña para la fogata, demostrando que su fortaleza no es solo física sino también emocional.
En los últimos días, los seguidores del programa han podido observar cómo Gloria Camila alterna su faceta guerrera en los desafíos con momentos de vulnerabilidad frente a la cámara, confesando sus miedos y añoranzas.
Su capacidad para mostrar emociones auténticas ha generado empatía entre los espectadores, quienes reconocen en ella a alguien que, aunque compite, nunca olvida la importancia de la familia y del amor perdido.
Durante una de las charlas nocturnas junto a Jessica, bajo la luz de la luna reflejada en el mar, la joven insistió:
“Echo de menos a los míos una barbaridad… cada vez que cierro los ojos, me vienen recuerdos de Michu, de los momentos que compartíamos… y también pienso en cómo estarán mis hermanos y si estamos siendo capaces de estar ahí los unos para los otros”.
Su sinceridad permitió a los espectadores asomarse a su mundo interior, donde la familia, el recuerdo de los que se han ido y la distancia de quienes ama, definen cada emoción y decisión que toma en la isla.
El relato de Gloria Camila también sirve para mostrar el lado más humano de los realities, donde el drama no siempre viene de los enfrentamientos o los retos, sino de la vida real y las emociones que los participantes arrastran consigo.
La joven continúa su aventura en ‘Supervivientes All Stars 2025’ con una mezcla de nostalgia, fortaleza y cariño, demostrando que, incluso en condiciones extremas, el vínculo con la familia y la memoria de los seres queridos puede marcar profundamente cada paso que se da en la arena y el mar.
Entre confesiones, lágrimas y recuerdos, Gloria Camila ha logrado convertir su experiencia en un reflejo de las emociones que todos llevamos dentro, recordando al público que, detrás de cada concursante, hay historias de amor, pérdida y resiliencia que van mucho más allá de la pantalla.
Su paso por el reality continúa, pero el eco de Michu y la cercanía de los suyos siempre la acompañarán, convirtiéndose en su motor y en su refugio en medio de la competencia.
