José Luis Perales, a sus 80 años, disfruta de una vida de lujo tranquila en Cuenca, rodeado de su familia y propiedades valoradas en millones de euros.

Dijeron que había muerto, pero José Luis Perales simplemente estaba de vacaciones, sonriendo ante los rumores mientras paseaba por su jardín en Cuenca.

A los 80 años, el hombre que nunca buscó la fama ahora disfruta de una vida de lujo tranquilo, rodeado de su familia y de las canciones que marcaron a generaciones.

Detrás de su sonrisa modesta se esconde una fortuna construida con décadas de música y disciplina. Desde su mansión de piedra en Cuenca hasta sus fincas rurales en Castejón y Sacedón, Perales ha convertido la sencillez en elegancia y el éxito en serenidad.

¿Cómo vive hoy uno de los compositores más queridos de España? En 2025, se estima que la fortuna de José Luis Perales ronda los 18 millones de euros.

La riqueza del artista va mucho más allá de sus canciones atemporales. A lo largo de las décadas, ha vendido más de 55 millones de discos, un logro que sigue generando regalías constantes y lo mantiene entre los artistas más ricos de España.

Su talento lo ha llevado a colaborar con leyendas como Rafael, Miguel Bosé y Rocío Jurado, y su trabajo se ha visto recompensado con una notable fortuna personal y múltiples propiedades.

Entre sus bienes inmobiliarios se encuentran una encantadora casa en el casco histórico de Cuenca, valorada en alrededor de 1 millón de euros, y otra en su ciudad natal de Castejón, una finca de 4 hectáreas cerca del pintoresco embalse de Buen Día, valorada en unos 1,5 millones de euros.

Su finca en Sacedón, Guadalajara, abarca casi 25,000 m² y está valorada en 800,000 €, combinando terrenos agrícolas con comodidades modernas, incluyendo un pequeño viñedo y una terraza abierta con vistas a las colinas.

Además, Perales posee dos apartamentos modernos en Valencia, cada uno valorado en aproximadamente 400,000 €, ideales para escapadas al Mediterráneo.

Pero su propiedad más cosmopolita es su ático en Madrid, ubicado cerca del Parque del Conde Orgaz y valorado en más de 1,8 millones de euros. Luminoso, espacioso y de estilo minimalista, este ático equilibra la sofisticación urbana con la calma que tanto valora.

La colección de autos de José Luis Perales también refleja su refinamiento y elegancia discreta. Entre sus posesiones más valiosas se encuentra un Mercedes-Benz clase E, valorado en unos 70,000 €, que utiliza para viajar entre Madrid y Cuenca.

Para los paseos por el campo, prefiere su Range Rover, un SUV de lujo robusto valorado en aproximadamente 110,000 €, que combina potencia con sofisticación.

En su garaje de Madrid también guarda un BMW serie 7, estimado en 120,000 €, que utiliza en ocasiones especiales.

Su colección de coches, valorada en unos 350,000 €, no busca llamar la atención con velocidad o lujo excesivo; se trata de calidad, fiabilidad y una elegancia silenciosa que refleja la esencia de su música.

La vida de Perales no solo se define por su éxito y su fortuna, sino también por su compromiso con la filantropía.

Aunque rara vez lo hace público, ha estado involucrado en numerosas causas benéficas enfocadas en el bienestar infantil, la educación y la inclusión social. Su generosidad es tan duradera como su música.

A lo largo de los años, ha donado aproximadamente un millón de euros a distintas iniciativas solidarias, apoyando campañas por los derechos y la educación de los niños en zonas desfavorecidas a través de UNICEF España.

También ha colaborado con Cáritas Española, contribuyendo económicamente y mediante conciertos benéficos para recaudar fondos destinados a familias afectadas por la pobreza y desastres naturales.

Tras retirarse de los escenarios, Perales decidió abrazar la vida que siempre había soñado, lejos de la fama, llena de familia, creatividad y paz. Desde el comienzo de su carrera, sabía cómo quería que terminara, despidiéndose donde todo había empezado, sobre el escenario.

Ahora, a los 80 años, pasa sus días en su casa de Cuenca, escribiendo en lo que él llama su refugio, cuidando su jardín y, por supuesto, componiendo. “Es hora de volver a casa”, dice, reflejando su deseo de regresar a la vida tranquila y sencilla que siempre ha valorado.

La historia de amor entre José Luis Perales y Manuela Vargas también es digna de mención. Su relación comenzó justo cuando su carrera empezaba a despegar en los años 70.

Se casaron el 30 de julio de 1977 en el convento de San Pablo de Cuenca, una celebración a la que asistieron alrededor de 2000 invitados.

La boda fue un evento memorable, descrito por los asistentes como “La boda del año”, una unión de amor y música enmarcada por el impresionante paisaje de las Oces del Júcar.

A pesar de su éxito, Perales nunca ha buscado estar bajo los reflectores. Su deseo ha sido permanecer detrás del escenario como compositor, pero el destino tenía otros planes.

La canción más famosa de Perales, “¿Y cómo es él?”, fue en realidad escrita por encargo para Julio Iglesias. Sin embargo, su discográfica insistió en que la cantara él mismo, lo que lo llevó a convertirse en una leyenda de la música hispana.

Hoy, a sus casi 80 años, José Luis Perales sigue viviendo rodeado de las cosas que más valora: la paz, la belleza y las recompensas silenciosas de una vida bien vivida.

Desde sus casas millonarias y su elegante colección de autos hasta su música atemporal y su historia de amor duradera, cada capítulo de su vida refleja gracia y autenticidad.

Su humildad y su devoción a la familia son lo que realmente lo definen, convirtiéndolo en un ícono no solo de la música, sino también de la humanidad.