El presidente Pedro Sánchez defendió la independencia del Poder Judicial tras la condena al fiscal general del Estado, lamentando la sentencia pero asegurando que el Gobierno acata el fallo y ha iniciado el procedimiento para nombrar a un nuevo fiscal.

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se enfrentó a una serie de preguntas complejas durante su última rueda de prensa, abordando tanto la situación internacional en Ucrania como la reciente controversia en torno al fiscal general del Estado.
La entrevista comenzó con Daniel Europapres, quien preguntó sobre el plan de paz impulsado en la cumbre del G20 que contempla cesiones territoriales de Ucrania a Rusia, y sobre la postura del Gobierno respecto a la inocencia del fiscal general y la posibilidad de un indulto.
Sánchez respondió con cautela, destacando la importancia de la participación ucraniana y europea en cualquier acuerdo:
“Nosotros damos la bienvenida a todos los esfuerzos que la administración estadounidense está haciendo por lograr la paz, pero Ucrania tiene que estar en esas conversaciones y Europa también”, enfatizó el presidente.
Además, subrayó que el objetivo no es solo la integridad territorial de Ucrania, sino también la defensa de un proyecto europeo basado en valores democráticos, multilateralismo y respeto al derecho internacional.
El presidente recalcó que cualquier plan de paz debe revisarse con profundidad para garantizar que Ucrania y Europa se sientan representadas y puedan construir una paz justa y duradera.
Sánchez destacó la relevancia de las conversaciones en Ginebra, donde participan diversos países de la coalición internacional, así como instituciones comunitarias, recordando que
“aún respetando y reconociendo el esfuerzo que hace la administración estadounidense, ese plan debe ajustarse para que podamos garantizar los principios fundamentales de seguridad y democracia que defendemos en Europa”.
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En relación con la polémica sobre el fiscal general del Estado, Sánchez se mostró firme en su defensa de la independencia judicial, aunque expresó su desacuerdo con la sentencia del Tribunal Supremo que condena al fiscal.
“Respetamos las sentencias del Tribunal Supremo, como no puede ser de otra manera, las acatamos, pero en una sociedad democrática podemos manifestar nuestra discrepancia sobre la orientación de esta sentencia”, afirmó.
El presidente insistió en su convicción sobre la inocencia del fiscal, basándose en testimonios de periodistas judiciales con amplia experiencia, y consideró que no fue responsable de las filtraciones por las que se le acusa.
En este sentido, anunció que el Gobierno ha iniciado el procedimiento para nombrar a un nuevo fiscal general del Estado y que el perfil buscado corresponde a profesionales con dilatada trayectoria jurídica, citando como ejemplo a Álvaro García Ortiz, quien ha desempeñado su labor de forma positiva.
Nicolás Castellano, de Cadenaser, abordó la urgencia del plazo dado a Ucrania hasta el jueves para responder al plan de paz, y planteó también cuestiones sobre Venezuela y la selección del nuevo fiscal.
Sánchez reiteró la necesidad de encontrar espacios de diálogo donde estén representados Ucrania y las instituciones comunitarias, recordando que la invasión rusa no solo amenaza a Ucrania, sino que cuestiona la arquitectura de seguridad europea:
“Lo importante es que encontremos espacios de diálogo donde estén representados Ucrania y Europa.
La presión de Estados Unidos y los plazos urgentes no deben desviar nuestra atención sobre los fundamentales de esta invasión”, señaló.
Sobre Venezuela, Sánchez reafirmó la posición constante de España de respeto al derecho internacional y de apertura a canales de diálogo, aunque aclaró que España no reconoce al presidente Nicolás Maduro como legítimo representante del pueblo venezolano.
Finalmente, Iñaki Aguado, de Tele5, preguntó sobre la condena del fiscal y posibles abusos de poder del Tribunal Supremo, así como la influencia de sectores judiciales en el gobierno.
Sánchez respondió con firmeza, asegurando que el Ejecutivo respeta la independencia judicial y que las críticas sobre intentos de control del Tribunal Supremo carecen de fundamento.
“Acatamos la sentencia aunque no la compartimos, y hemos puesto en marcha el proceso de sustitución del fiscal general del Estado. Podemos lamentar el fallo y no compartirlo, pero siempre respetando el Estado de derecho”, declaró.
El presidente insistió en que la postura del Gobierno se basa en principios democráticos y en la evidencia de que el fiscal general no tuvo responsabilidad en los hechos que se le imputan.
Asimismo, destacó que el nombramiento del nuevo fiscal buscará perfiles con sólida experiencia jurídica y compromiso con la legalidad.
La rueda de prensa concluyó con Sánchez recordando que la acción gubernamental se orienta a garantizar la justicia y la estabilidad democrática, mientras España continúa participando activamente en los procesos internacionales de paz y seguridad.
En conjunto, la intervención de Pedro Sánchez combinó un análisis riguroso de la situación internacional con una defensa firme de la legalidad y la independencia del sistema judicial, reflejando la complejidad de gestionar asuntos nacionales e internacionales en un contexto político marcado por la controversia y la presión mediática.
La claridad y contundencia de sus respuestas, así como la reiteración de los principios democráticos, subrayan el compromiso del Ejecutivo con la transparencia, la legalidad y la cooperación internacional.