RTVE hace público el enorme cantidad de dinero que Broncano y Lalachus cobraron por las campanadas.

El ente público desvela que la producción completa del programa de la pasada nochevieja ascendió a 250.000 euros.

Casi tres meses después, RTVE desvela la cantidad que cobraron David Broncano y Lalachus por presentar las ‘Campanadas 2025’ en los canales de RTVE.

En una respuesta escrita al Grupo Popular en el Congreso de los Diputados, el ente público ha revelado la cantidad que cobraron los presentadores de ‘La Revuelta’.

“En el momento de contestar a esta pregunta y según consta en el presupuesto anexo al contrato de la productora, en la partida “Presentadores”, se ha previsto un caché de 66.

000 euros”, reza la respuesta dada por la cadena presidida por José Pablo López Sánchez.

No obstante, RTVE afirma que se trata de un importe “aún pendiente de liquidación” y que la cifra no se desglosa por cada uno de los integrantes del dúo, sino que es “conjunta”.

En el contrato firmado entre RTVE y El Terrat, la productora de ‘La Revuelta’, esta partida de 66.000 euros forma parte del total de la producción, que asciende a un presupuesto de 248.

500 euros, correspondiendo la mayoría a recursos externos (154.000 euros).

Unos emolumentos que superan la inversión realizada para el mismo espacio en años anteriores.

En 2024, el ente público informó que pagó 25.000 euros a cada uno de los rostros que dieron la bienvenida al nuevo año en los canales públicos estatales.

Así, el montante final habría ascendido a 75.000 euros por contar en pantalla con Ramón García, Ana Mena y Jenni Hermoso.

No obstante, RTVE puntualizó más adelante que la futbolista de la selección española femenina en realidad percibió 11.000 euros, por lo que la cifra total para presentadores fue de 61.000 euros (5.000 euros menos que lo presupuestado para las últimas campanadas).

Precisamente, la creadora de este formato es la compañía que más dinero ha recibido del ente público en los últimos meses.

El programa de David Broncano fue el que consiguió el mayor contrato firmado por el ente público durante 2024.

En concreto, se destinaron más de 28 millones de euros para ‘El Terrat Gestiones XXI’, la productora que fundó Andreu Buenafuente.

Por debajo de la productora de ‘La Resistencia’, aunque casi con diez millones menos de por medio, está BAMBU Producciones’, la productora de ‘La Promesa’, con quien RTVE firmó un contrato por valor de 17, 2 millones de euros.

Boomerang TV se sitúa en la tercera posición con los 15,7 millones de euros que suman la serie La Moderna (13 millones) y la producción externa del Benidorm Fest 2025 (casi 2,7 millones de euros).

El cuarto puesto corresponde a Shine Iberia, con 14,8 millones de euros, pero repartidos en cuatro formatos: MasterChef (7 millones), Maestros de la costura (6), La Ruta Los Morancos (casi 1,4) y MasterChef Celebrity (178.000 euros).

Campanadas polémicas
La emisión de las campanadas reunió a 5,9 millones de espectadores en todos los canales, con un 38,7% de cuota.

Solo La 1 congregó a 4,8 millones, alcanzando un 31,2% de share.

En concreto, en el minuto que duraron, 5.642.000 espectadores se sentaron con las uvas a ver a los humoristas.

Pedroche y Alberto Chicote engancharon al 32,6% del share, con 5.550.000 espectadores en Antena 3 de Atresmedia.

A pesar de haber conseguido el liderazgo de audiencia en la última emisión del año, la retransmisión es recordada por la polémica provocada por Laura Yustres (nombre real de la humorista Lalachus), quien mostró una estampita del Sagrado Corazón con la imagen de la vaquilla del Grand Prix de La 1.

Este acto fue calificado como una “ofensa al cristianismo” por varias asociaciones religiosas.

Sin embargo, el ente público zanjó la polémica al “no encontrar ningún indicio de ofensa”, según explicó la Defensora del Espectador tras recibir varias denuncias.

“Ambos presentadores aportaron un valor añadido muy destacado”, aseguran los responsables de RTVE en la respuesta escrita a los diputados del Partido Popular en el Congreso de los Diputados.

“Su elección persigue afianzar principios como el reconocimiento, la confianza o la familiaridad, elementos que, situados en el entorno de las corporaciones audiovisuales, contribuyen a mejorar la reputación de la marca”, añaden.