Desde que decidiera alejarse del foco mediático hace casi 40 años, la icónica intérprete malagueña se ha saltado su norma de oro en pocas ocasiones.

Para muchos españoles, Pepa Flores (Málaga, 1948), más conocida artísticamente como Marisol, marcó toda una época en el mundo del cine y la música.
Considerada una niña prodigio desde su más tierna infancia, la malagueña se convirtió en los años 60 en una de las primeras estrellas infantiles de nuestro país tras ser descubierta por el productor Manuel Goyanes.
Tras el estreno de la que fuera su primera película, ‘Un rayo de luz’, no dejaron de llegar proyectos profesionales, destacando algunos como ‘Tómbola’, ‘Las cuatro bodas de Marisol’ y ‘Solos los dos’.
A pesar del éxito que su aparición supuso para la cartelera española, no fue así para la conocida actriz, que comenzó entonces su particular descenso a los infiernos.
El estrés al que estuvo expuesta desde bien pequeña no hizo más que darle problemas, ocasionándole una úlcera en el estómago con apenas 15 años.
«Lamento mi descubrimiento para el cine. Me habría gustado empezar más tarde. No he tenido infancia, no he podido jugar. Mis años de estrella me han quitado muchas cosas», contó ya más adulta a la revista Blanco y Negro en 1974.

A esta complicada juventud, que le causó infelicidad durante muchos años, se le sumó también al desamor: antes de cumplir 40 años, ya se había divorciado dos veces. Primero de Carlos Goyanes, con quien se casó en 1969 y del que se separó apenas tres años después, y después del bailarín Antonio Gades, padre sus hijas María, Tamara y Celia Flores. Con este último contrajo matrimonio en 1982 tras casi 10 años de relación, y de él se separaría cuatro años más tarde del enlace.
Todo este cúmulo de infortunios le llevó a decir basta en 1985, tras 25 años de carrera, y retirarse de la actuación y la vida pública sin dar muchas explicaciones.
Fue ese mismo año cuando la malagueña, que apenas tenía 38 años en aquel momento dio vida a su último personaje en la película ‘Caso Cerrado’ y se alejó del foco mediático.
Desde entonces, ha vivido una vida sencilla en su tierra natal, Málaga, donde reside actualmente a sus 77 años.
La muerte de Massimo Stecchini, la pérdida más dura para Pepa Flores

Casi 40 años después de tomar la decisión de permanecer como una persona anónima, son pocas las ocasiones en las que Pepa Flores ha reaparecido públicamente.
Ni siquiera lo hizo en 2020 cuando la Academia de Cine decidió concederle el Goya de Honor, un galardón que no acudió a recoger a pesar de que la gala se celebraba en Málaga, manteniendo así el deseo de continuar alejada de las cámaras.
Sí acudieron sus hijas, que agradecieron el premio en su honor.
No obstante, sus discretas apariciones se han reducido aún más desde que en 2023 perdió por sorpresa a su pareja, el italiano Massimo Stecchini, con el que mantenía una relación desde 1987.
El que fuera el compañero de Marisol durante cerca de 35 años falleció el pasado año 2023 de un infarto en su casa de La Malagueta, unos días antes de cumplir 64 años.
La repentina tragedia supuso un verdadero golpe para Flores, tal y como reconoció tiempo después su íntima amiga Soledad Jara.
Esta aseguró entonces que el fallecimiento de su pareja había sido «un shock muy fuerte» para Pepa, que lo estaba pasando realmente mal ante esta repentina pérdida.
«Lo que pasa es que ella todavía no sale. Ya sabéis que ella no va a ningún sitio, nada de nada», contó entonces.
Apoyada en sus hijas y en el cantante Pablo Alborán, gran amigo de la familia

La dura partida de Massimo ha hecho que la protagonista de ‘Tómbola’ se haya alejado aún más si cabe de la vida pública y se haya vuelto más hermética en torno a su imagen.
Sin embargo, la andaluza sorprendió el pasado diciembre de 2024 reapareciendo con motivo del cumpleaños de una de sus hijas, la también intérprete María Esteve, que festejó junto a su familia y sus amigos esta fecha tan especial, donde su madre no quiso faltar.
La que fuera estrella infantil del cine español no se ausentó del 50 cumpleaños de su primogénita, celebrado en plena Navidad, algo que la propia María compartió.
«Pues hemos llegado. Un viaje hasta hoy extraordinario y todo lo que queda por venir. Feliz de celebrar mi cumpleaños, rodeada de amor y de sorpresas que jamás esperaba y con el deseo para todos de un magnífico Año Nuevo. Salud, mucha salud, paz y amor para todos», escribía María junto a unas imágenes, entre las que se incluía un retrato familiar con la artista y sus dos hermanas, Tamara Esteve y Celia Flores.
Quien también estuvo presente en la celebración fue uno de los amigos más íntimos de María Esteve, el cantante malagueño Pablo Alborán, que aprovechó para compartir una instantánea con la madre de la cumpleañera.
El intérprete de ‘Solamente tú’, que pasó la tarde junto a la familia de Marisol, publicó en su historia de Instagram una imagen junto al texto «Te quiero, Pepa».
En esta fiesta, que tuvo lugar en un chiringuito del Rincón de la Victoria de Málaga, la protagonista de ‘Tómbola’ también pudo disfrutar de una bonita jornada junto a sus hermanos Enrique Flores y Vicky Flores, su cuñada Marta Prats y su sobrina María. Un momento perfecto para volver a sonreír tras la dura pérdida del hombre con el que más tiempo ha compartido.
Su último movimiento: poner a la venta su ático de Málaga

Entre los últimos movimientos que le hemos visto hacer a la actriz en estos años se encuentra la venta de su ático ubicado en la playa La Malagueta, en Málaga, donde vivió durante los últimos 40 años junto a su difunta pareja.
Así lo reveló en exclusiva la revista Lecturas el pasado mes de marzo, explicando que el motivo era que la andaluza quería alejarse del inmueble, que está lleno de recuerdos y momentos que pasó junto a Massimo.
La vivienda fue adquirida en 1988 cuando Marisol se separó definitivamente de su entonces marido, el bailarín Antonio Gades.
Este cuenta con 150 metros cuadrados, con tres dormitorios, dos baños y dos terrazas y está valorado en cerca de 1,5 millones de euros.
Además, ha sido reformado para ampliar el dormitorio principal y añadirle un gran armario.
En las fotografías publicadas en el portal, se puede apreciar una vivienda llena de color, con paredes en diferentes tonalidades y, además, algunos detalles andaluces como los azulejos de los baños.
Además, según la descripción, el edificio cuenta con acceso directo a la playa, plaza de garaje incluida en el precio y trastero.