José Luis Rodríguez estaba bajo la máscara de Aguacate, la que más había desubicado a los Javis, Ana Milán y Alaska.
A las 23.12 horas, lo miércoles son de ‘Mask Singer’.
Esta cuarta edición, que empieza casi media hora más tarde de lo anunciado por Antena 3, confirmando la gran preocupación de Arturo Valls por el horario del programa, viene más fuerte que otras ediciones.
Esta temporada de ‘Mask Singer’ ha mantenido los dobles desenmascaramientos en sus galas.
La primera máscara en conocer su identidad era Aguacate.
La que tenía “el corazón más duro”.
Al igual que el resto de disfraces, tenía el objetivo de no ser desenmascarado por el equipo de investigadores formado por Ana Milán, Alaska, Javier Calvo y Javier Ambrossi, pero su misión no era cumplida.
“Aunque tenga un corazón muy duro, Aguacate se presenta en ‘Mask Singer: adivina quién canta’ para demostrarnos a todos lo blandito que puede llegar a ser”. Con estas palabras presentó el programa a este disfraz.
“Cremoso, divertido y mantengo a raya tu colesterol”, comenzaba su potente presentación.
Resaltaba su «arte y poder de seducción» asegurando que «conquista hasta los platós con más estrellas».
Una de las cosas que más llamaba la atención de los investigadores era lo que contó de…
“Todo cuanto soy y por lo que me conocen se lo debo a mi Virgen de Guadalupe”.
Las apuestas de los investigadores fueron Nacho Cano, de Javier Calvo; Juanpa urita, de Javier Ambrossi; Carlos Rivera de Ana Milán y por último Iván Sánchez de Alaska.
Finalmente Aguacate sorprendía a todos al desenmascararse y desvelando que la celebrity era, nada más y nada menos que José Luis Rodríguez, El Puma.
“Me siento rarísimo”, dijo el cantante ganador de un Grammy latino, mientras Calvo aseguraba que se le había pasado su nombre por la cabeza.