Por Nuestro Corresponsal de Política, Gestión Pública y Liderazgo.
Tristeza absoluta.
La confirmación de una dolorosa pérdida ha sumido a la capital colombiana y a los círculos políticos nacionales en un profundo e inesperado luto.
Familiares y amigos de Andrés Villamizar, conocido cariñosamente como “Pipo”, lamentaron su fallecimiento con mensajes de una emotividad que trasciende las fronteras de la política.

El alcalde de Bogotá, Carlos Fernando Galán, fue quien confirmó la dura noticia de la muerte de su amigo y exrepresentante a la cámara, Villamizar.
Pipo, un politólogo de formación y vocación, se destacó por su inteligencia, su lealtad inquebrantable y su profundo compromiso con el proyecto político de Galán.
Su figura se erigió como un pilar fundamental en la trayectoria política del actual mandatario de los bogotanos.
El apoyo de Villamizar fue crucial y se hizo especialmente visible en la campaña electoral más reciente.
Esta fue la contienda con la que Carlos Fernando Galán, luego de tres intentos decididos y persistentes, logró finalmente cumplir su sueño de asumir las riendas de la capital del país.
El éxito de Galán en la Alcaldía no puede entenderse sin la contribución estratégica y el apoyo moral constante de Pipo.
La relación entre ambos era mucho más que una alianza política; era una hermandad forjada en el fragor de la lucha por el servicio público.
El mandatario capitalino utilizó su cuenta oficial de X (anteriormente Twitter) para compartir un emotivo mensaje de despedida.
En sus palabras, Galán elevó a Pipo a la categoría más alta de afecto y respeto.
Lo describió como “un hermano que la vida le regaló”.
La publicación resonó fuertemente entre la ciudadanía y los observadores políticos, quienes reconocieron la sinceridad del dolor del alcalde.
“Pipo, siempre lo llevaré en el corazón.
Un hermano que me regaló la vida, un verdadero líder que nos llegó al alma a todos los que tuvimos el privilegio de conocerlo.”
Galán continuó su sentido homenaje, destacando las cualidades intrínsecas de su amigo y colaborador.
“Su vocación y lealtad siempre me inspirarán.
Nos va a hacer una falta infinita.
Gracias por tanto”, concluyó el mensaje, firmado con la solemnidad del cargo: Carlos Fernando Galán, Alcalde de Bogotá.
Esta manifestación pública de duelo por parte del alcalde subraya no solo la pérdida personal, sino también el vacío profesional que deja Villamizar en la actual administración y en el futuro del movimiento político.
El luto no se limitó al círculo íntimo del alcalde.
Su hermano, Juan Manuel Galán, también se pronunció en la misma red social.
En su declaración, expresó que la colectividad del Nuevo Liberalismo estaba de luto por la partida de un miembro insustituible.

Andrés Villamizar no solo fue un compañero y amigo.
También desempeñó un rol operativo crucial como coordinador del partido en la capital colombiana.
Las palabras de Juan Manuel Galán enfatizaron la importancia estructural de Pipo dentro del movimiento.
El Nuevo Liberalismo, fundado por el legendario Luis Carlos Galán, padre de los hermanos Galán, ve partir a uno de los líderes más dedicados y con mayor proyección en la defensa de sus principios.
La comunicación del senador Galán también incluyó un profundo abrazo solidario dirigido a la familia de Andrés Villamizar.
“A su hijo Octavio, sus padres Jesús y Fanny, a sus hermanos y Alejandro, un abrazo solidario.
Buen viaje Pipo.
Juan Manuel Galán.”
Este gesto solidario resalta la dimensión humana de la tragedia y la unidad del clan político en torno a la familia enlutada.
La trayectoria de Andrés Villamizar se caracterizó por su firme compromiso con la ética pública.
Como exrepresentante a la cámara, dejó una huella de rigor y seriedad en su labor legislativa.
Su conocimiento de la gestión pública y su habilidad para tejer acuerdos fueron activos invaluables, especialmente en la compleja y a menudo polarizada arena política bogotana.
Los analistas concuerdan en que la partida de Pipo representa un golpe significativo para la Alcaldía de Bogotá.

Villamizar era una de las mentes brillantes detrás de la estrategia de gobernanza de Galán.
Su capacidad para anticipar escenarios y su manejo de crisis eran reconocidos por sus pares y adversarios.
Su legado, sin embargo, trasciende los títulos y los cargos.
Se halla en la inspiración que su liderazgo generó en las nuevas generaciones de politólogos y jóvenes que ven en el Nuevo Liberalismo un camino para la transformación social.
La vocación de servicio que Galán destacó en su mensaje es un faro que Pipo dejó encendido.
A pesar de la tristeza que embarga a quienes tuvieron el privilegio de conocerlo, el recuerdo de su lealtad inquebrantable y su liderazgo genuino será la guía para continuar con los proyectos que él ayudó a cimentar.
La ciudad de Bogotá despide a un gran servidor público.
El Nuevo Liberalismo, a uno de sus coordinadores más eficaces.
Y el alcalde Carlos Fernando Galán, a un hermano.
El vacío que deja “Pipo” es inmenso.
Su memoria perdurará no solo en los archivos de la cámara o en los planes de desarrollo de la capital, sino en la calidad humana y la amistad que brindó sin reservas.
El dolor por su ausencia es la medida exacta de la gran persona que fue Andrés Villamizar.
Un líder que, incluso en su partida, une a la política en un sentimiento de respeto y gratitud.
El impacto de su deceso obligará a reajustes en la estructura de apoyo al alcalde Galán.
Pero su espíritu de trabajo y compromiso sigue siendo el motor para seguir adelante.
La nación, a través de sus líderes y sus ciudadanos, acompaña a la familia Villamizar en este momento de profundo dolor.