El caso de Luz Mery Tristán, campeona mundial de patinaje y empresaria colombiana, sigue estremeciendo al país y al mundo.
Su trágico asesinato a manos de su pareja, Andrés Gustavo Ricci, ha desatado una ola de indignación y reflexiones sobre la violencia de género y la impunidad en casos de feminicidio.
Según los últimos informes, el crimen ocurrió en la madrugada del sábado.
Sin embargo, lo más impactante es que Ricci permaneció junto al cadáver de Luz Mery durante 24 horas sin informar a las autoridades ni a la familia.
Cuando los agentes llegaron al lugar, encontraron a la deportista tirada en un sofá y a Ricci sentado cerca de ella.
En ese momento, el sospechoso pidió asistencia médica alegando problemas cardíacos, siendo trasladado a una clínica para su revisión.

La relación entre Luz Mery y Andrés Ricci parecía estar marcada por episodios de violencia y agresividad.
Según declaraciones de Vicky Tristán, hermana de la patinadora, Ricci ya había golpeado a Luz Mery en al menos dos ocasiones.
A pesar de estos antecedentes, la pareja planeaba casarse en octubre en las playas de Miami, Estados Unidos.
En los días previos al crimen, ambos estuvieron buscando vestidos y trajes para su boda, lo que hace que el asesinato sea aún más desconcertante.
La fiscalía ha recopilado pruebas contundentes contra Ricci, incluyendo el arma homicida, que fue encontrada en la escena del crimen y pertenece al sospechoso.
Las autoridades han asegurado que no habrá negociación ni tregua en este caso, y se espera que Ricci enfrente una condena ejemplar que podría oscilar entre 40 y 50 años de prisión, la máxima pena en Colombia.

A pesar de haber sido capturado en flagrancia, Ricci ha negado los cargos y se declara inocente.
Esta postura ha generado malestar entre los familiares de Luz Mery y la opinión pública, quienes consideran que el caso podría dilatarse si el acusado contrata un equipo legal poderoso.
La historia reciente de Colombia ha demostrado que, en algunos casos, el dinero y la influencia pueden jugar un papel en la justicia, como ocurrió con el caso de Mauricio Leal y su hermano.
La familia de Luz Mery, especialmente su hermana Vicky, ha hecho un llamado a todas las mujeres que enfrentan situaciones de violencia doméstica para que no se queden calladas.
“Si tu pareja te falta al respeto o muestra signos de agresividad, aléjate.
No esperes a que las cosas lleguen a un punto irreversible”, expresó Vicky en una entrevista.
También destacó que la familia ya conocía el comportamiento agresivo de Ricci y lamentó no haber actuado a tiempo.

El caso de Luz Mery Tristán ha movilizado a organizaciones de mujeres y colectivos sociales en todo el país.
En Cali, se llevó a cabo un plantón bajo el lema “Nos queremos vivas”, en el que se exigió justicia para Luz Mery y se pidió un compromiso real de la sociedad para erradicar el machismo y la violencia de género.
“Este caso no puede quedar impune.
Luz Mery dio tanto a Colombia, no solo en el deporte, sino también con su fundación para niños vulnerables.
Merece justicia”, expresó una de las participantes del evento.
La fundación de Luz Mery, creada para apoyar a niños en situación de vulnerabilidad, es uno de los legados más importantes que dejó la deportista.
Su muerte debe servir como un llamado a la acción para prevenir futuros casos de violencia y para garantizar que los responsables enfrenten las consecuencias de sus actos.
Mientras tanto, la audiencia de Andrés Ricci será clave para determinar el rumbo de este caso.
Familiares, amigos y admiradores de Luz Mery esperan que la justicia actúe de manera ejemplar y que este crimen no quede impune.
La sociedad colombiana está atenta y exige que este caso marque un antes y un después en la lucha contra la violencia de género.