Carlos Vives rompió el silencio con profundo y visible dolor tras la muerte de Egidio Cuadrado, su acordeonista, compadre y pilar fundamental, confirmando que la pérdida deja a su banda, La Provincia, sin su ancla espiritual y musical.

El músico falleció a los 71 años luego de luchar infructuosamente contra una delicada neumonía que lo llevó a la UCI.

Vives confesó que la tristeza es inmensa, pues Egidio fue una pieza clave para encontrar su identidad musical, lo mantuvo “con los pies en la tierra” y le permitió alcanzar a grabar su último álbum, Escalona.

El mundo de la música vallenata y la cultura colombiana se ha vestido de luto riguroso por la muerte de Egidio Cuadrado, famoso acordeonero, maestro y uno de los más grandes y auténticos representantes del género en el país.

Su legado profesional fue gigante.

Cuadrado navegó con éxito a través de diversos proyectos y hits, pero fue su trabajo incondicional, su hermandad y su magistral desempeño junto al ícono Carlos Vives lo que lo consolidó como una figura musical e identitaria inolvidable.

El músico falleció el 21 de octubre de 2024 en la Clínica Colombia a sus 71 años, tras una valiente y larga lucha contra graves problemas de salud que terminaron por vencerlo.

LA BATALLA EN LA UCI Y EL COMUNICADO OFICIAL

Según el comunicado oficial emitido por la institución médica, el deceso de Egidio Cuadrado se produjo después de una compleja batalla contra la enfermedad.

El acordeonero había estado internado a causa de una “delicada neumonía” que lo aquejó severamente y que lo llevó a requerir cuidados críticos en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI).

La enfermedad se había recrudecido, a pesar de que el músico venía luchando contra diversas afecciones de salud desde hace varios años, lo que hacía que su círculo cercano estuviera en constante alerta.

“Con profundo dolor, la Clínica Universitaria Colombia se permite informar a la opinión pública que ha fallecido el artista vallenato Egidio Cuadrado”, se leyó en el reporte oficial, un mensaje que confirmó la dolorosa e irreversible pérdida para el folclor nacional.

Tras la noticia, las miradas de los fanáticos, los medios de comunicación y la industria musical se posaron de inmediato en Carlos Vives.

El famoso artista samario, líder de La Provincia, no solo forjó un sólido camino profesional con el acordeonero, sino que construyó con él una hermandad y una historia musical que será recordada por décadas.

Carlos Vives, durante los días en que su “compita” estuvo enfermo y luchando en la clínica, se había mantenido inquebrantable, positivo y esperanzado en que Egidio saldría adelante y lograría recuperarse de los temas que golpeaban su cuerpo.

LA EXPRESIÓN DE UN DOLOR PROFUNDO: “MURIÓ LA PROVINCIA”

Al confirmar que el desenlace fue el temido, el samario no dudó en despedir a su amigo con un post cargado de significado en sus redes sociales, apenas Egidio Cuadrado cerró los ojos en la madrugada de esa triste fecha.

Carlos Vives subió una imagen del músico y escribió una pequeña, pero poderosísima línea que reunía todo el significado posible de su profundo vínculo y de la huella que dejaba la partida del acordeonero.

“Murió la provincia”, sentenció el vallenatero, refiriéndose a su banda y a la identidad musical que Egidio Cuadrado ayudó a cimentar.

El impacto de su dolor se hizo aún más palpable cuando Carlos Vives concedió entrevistas a distintos medios para sincerarse y hablar sobre el vacío que dejaba la muerte de su compañero.

En una emotiva y extensa charla con Noticias Caracol, la celebridad apuntó que este era un momento de inmensa tristeza, pues Egidio Cuadrado era una persona muy valiosa en su vida, tanto en lo personal como en lo artístico.

“Nos mantuvo con los pies en la tierra ahí en mi banda La Provincia”, explicó Vives, subrayando que Egidio no era solo un músico, sino el ancla emocional y de identidad del grupo.

El acordeonero era visto como un guardián de la autenticidad, la conexión de la banda con las raíces puras del vallenato.

“Por eso digo que murió la provincia”, reiteró, confirmando que la banda sentía una pérdida que trascendía lo musical.

Vives recordó a Egidio como una persona “muy alegre”, destacando que la trayectoria que recorrieron juntos está llena de “recuerdos increíbles”, describiéndolo como “muy auténtico y viajando por el mundo entero”.

EL LEGADO CLAVE EN LA IDENTIDAD VALLENATA DE VIVES

El momento más conmovedor de la entrevista llegó cuando Carlos Vives, con la voz quebrada y entre lágrimas, apuntó a la trascendencia de su amigo en su propia carrera.

Confesó que se quedaba con una imagen muy importante de Egidio, pues fue una “pieza clave para encontrar su identidad” musical.

Egidio Cuadrado fue esencial en el proceso en el que Carlos Vives se despojó del pop y el rock para abrazar las raíces colombianas, logrando un estilo único y exitoso.

Vives mencionó que Egidio Cuadrado se acopló perfectamente a su estilo de fusión, ayudándole a construir la sonoridad que lo hizo famoso a nivel mundial.

El cantante samario reveló que, a pesar de la tristeza actual, él ya había “llorado bastante” a su amigo, pues Egidio venía luchando por su salud desde la pandemia.

“Tuvo un momento muy difícil porque pensamos que nos dejaba desde allá”, confesó Vives.

Reconoció que desde aquel momento de crisis, la vida de Egidio había sido una sucesión de “altibajos” y “muchas emociones”.

El músico encontró un pequeño consuelo al recordar el último proyecto que lograron concretar juntos.

“Alcanzamos a grabar un último álbum que fue el de Escalona“, agregó Carlos Vives, muy triste y confirmando que la última producción del grupo lleva el sello invaluable del maestro Cuadrado.

El legado de Egidio Cuadrado, su alegría contagiosa, su autenticidad inquebrantable y su trabajo incansable recorriendo el mundo junto a Carlos Vives, será recordado por generaciones.

Su ausencia no es solo la pérdida de un acordeonista, sino el vacío inmenso en el corazón de La Provincia, una banda que, a partir de ahora, deberá navegar sin el ancla emocional y musical que Egidio Cuadrado representaba.