El Destino de una Estrella: La Historia Detrás de “Mujer Bonita”
Era una noche estrellada en Los Ángeles, y el bullicio de la ciudad se sentía en el aire.
Julia Roberts, una joven actriz de 23 años, se preparaba para audicionar para un papel que cambiaría su vida.
La película era “Mujer Bonita”, una comedia romántica que prometía ser un gran éxito.
Sin embargo, el camino hacia la fama no fue fácil.
El guion original de la película era oscuro y trágico, donde Vivian, el personaje de Julia, era una prostituta adicta a la cocaína.
Afortunadamente, los estudios de Disney decidieron reescribir la historia, transformándola en un cuento de hadas moderno.
Las audiciones para el papel principal fueron intensas.
Rebeca Schaefer, una joven actriz prometedora, había sido la primera opción, pero su trágica muerte dejó un vacío.
Los productores se enfrentaron a muchos rechazos.
Actrices como Molly Ringwald y Winona Ryder consideraron el papel demasiado denigrante y decidieron no participar.
Finalmente, después de muchas audiciones, Julia Roberts fue elegida casi de manera inesperada.
“Cuando me llamaron, no podía creerlo”, recordó Julia años después.
El papel del millonario Edward, interpretado por Richard Gere, también tuvo un camino complicado.
Al principio, se pensó en actores como Al Pacino y John Travolta, pero todos rechazaron el papel.
Fue solo después de una conversación sincera con Julia que Richard decidió aceptar.
El rodaje comenzó el 24 de julio de 1989, y la química entre Julia y Richard era palpable.
Una de las escenas más memorables fue cuando Edward le regala a Vivian un collar de diamantes.
En un momento de improvisación, Richard cerró la caja justo cuando Julia se acercaba, creando una reacción genuina que los directores decidieron mantener.
“Esa espontaneidad hizo que la escena fuera aún más especial”, comentó Julia.
La película no solo capturó la atención del público por su historia, sino también por su música.
La canción “Pretty Woman” de Roy Orbison se convirtió en un himno, mientras que “It Must Have Been Love” de Roxette resonó en los corazones de todos.
“Era como si la música hablara de nosotros”, reflexionó Julia.
A medida que la película avanzaba, el equipo se dio cuenta de que estaban creando algo único.
El director, Gary Marshall, hizo un cameo como un vagabundo, lo que añadió un toque de humor a la película.
A pesar de ser un éxito rotundo, la película también enfrentó críticas.
Muchos la consideraron un relato machista, donde un hombre rico rescataba a una mujer de la marginalidad.
Julia fue consciente de estas críticas y reflexionó sobre ellas en varias entrevistas.
“No creo que pudiéramos hacerla hoy”, dijo en una ocasión.
“Pero eso no impide que la gente siga disfrutándola”.
Con un presupuesto de solo 14 millones de dólares, “Mujer Bonita” recaudó más de 400 millones en taquilla.
El éxito fue abrumador.
Las marcas de autos como Ferrari y Porsche se negaron a que Richard manejara sus vehículos debido a la temática de la película.
En su lugar, condujo un Lotus Esprit, lo que, irónicamente, triplicó las ventas de la compañía.
A medida que la película se acercaba a su estreno, el equipo se dio cuenta de que habían creado un clásico.
El vestuario de Vivian, especialmente el icónico vestido rojo que usó en la ópera, se convirtió en un símbolo de la moda de los años 90.
“Ese vestido es una obra maestra”, dijo Julia en una entrevista.
Los críticos y el público no tardaron en reconocer la magia que habían creado.
La película se convirtió en un fenómeno cultural, y la actuación de Julia fue aclamada en todo el mundo.
Ganó un Globo de Oro y recibió su primera nominación al Oscar.
“Fue un sueño hecho realidad”, recordó Julia con una sonrisa.
Los años pasaron, pero “Mujer Bonita” siguió siendo un referente en la cultura popular.
Gary Marshall continuó utilizando elementos de la película en sus futuros proyectos, como “El Diario de la Princesa”.
La conexión entre Julia y Richard fue tan fuerte que siete años después volvieron a trabajar juntos en “Novia Fugitiva”.
El legado de “Mujer Bonita” perdura, y su música sigue resonando en las listas de reproducción de muchas personas.
“Siempre recordaré esos momentos en el set”, dijo Julia.
“Fue una experiencia que me marcó para siempre”.
La historia de “Mujer Bonita” es un recordatorio de que, a veces, los caminos más inesperados pueden llevar a los destinos más maravillosos.
Julia Roberts y Richard Gere se convirtieron en íconos, y su película sigue siendo un símbolo de amor y esperanza.
“Gracias a todos por hacer de esta película un clásico”, concluyó Julia en una reciente celebración del aniversario de la película.
Y así, en una noche estrellada en Los Ángeles, el legado de “Mujer Bonita” continúa brillando, recordando a todos que el amor puede surgir en los lugares más inesperados.
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