¡Escándalo en el Bernabéu! El Madrid Roba Ante el Alavés para Salvar a Xabi Alonso: Vini y Asensio en el Ojo del Huracán
El Real Madrid se presentó en el Santiago Bernabéu para enfrentar al Alavés en un partido que prometía ser un mero trámite, pero que rápidamente se convirtió en un espectáculo de controversia y decisiones arbitrales discutibles.
Desde el inicio, el ambiente estaba cargado de tensión, y los aficionados esperaban ver a su equipo dominar como de costumbre.
Sin embargo, lo que se desarrolló en el campo fue un verdadero esperpento.
El Madrid, a pesar de su calidad, se vio envuelto en una serie de decisiones que dejaron a muchos preguntándose si el arbitraje había sido favorable de manera sospechosa.

La figura de Xabi Alonso, que se encontraba en el banquillo del Alavés, era objeto de debate, ya que su futuro estaba en juego, y una derrota podría significar su despido inminente.
La primera controversia llegó cuando Asensio, en una jugada desafortunada, le propinó una patada a un jugador del Alavés en una acción que el árbitro, sorprendentemente, decidió ignorar.
“¿Cómo es posible que el árbitro, a menos de un metro, no saque ni una tarjeta amarilla?”, se preguntaba Roncero, visiblemente indignado.
La acción fue solo el comienzo de un carrusel de decisiones que harían que los aficionados del Alavés se sintieran robados.
El gol de Mbappé, que parecía sellar la victoria del Madrid, fue otro punto de controversia.

“¿Alguien puede explicarle a Sibera que solo necesitaba estirar un poco el brazo para evitar el gol?”, comentó Roncero, refiriéndose al portero del Alavés, quien no pudo hacer nada ante el disparo.
A pesar de que el Alavés había jugado un partido defensivo, su esfuerzo parecía estar siendo ignorado por el árbitro, quien, según muchos, estaba decidido a favorecer al Madrid.
La segunda mitad trajo consigo más drama.
El Alavés logró marcar un gol que, sorprendentemente, fue anulado tras una revisión del VAR.
“El árbitro estaba dispuesto a todo para proteger a su Florentineza”, afirmó Roncero.

La frustración de los jugadores del Alavés era evidente, y la sensación de que el partido estaba siendo manipulado creció en el aire.
Vinicius Junior, quien ya tenía una tarjeta amarilla, se convirtió en el foco de otra polémica cuando se tiró en el área buscando un penalti que nunca existió.
“¿Pensáis que le sacaron la segunda amarilla? Por supuesto que no”, se lamentó Roncero, mientras la incredulidad se apoderaba de los aficionados.
La actuación de Vinicius, que ha sido criticada en varias ocasiones por simular faltas, se convirtió en un tema recurrente de discusión.
“Es un verdadero cachondeo que nunca se le castigue por sus piscinazos”, añadió Roncero, reflejando el sentir de muchos que veían cómo el Madrid se beneficiaba de decisiones arbitrales cuestionables.

El partido continuó con el Madrid intentando mantener su ventaja, pero la presión del Alavés no cesó.
A medida que el tiempo avanzaba, la tensión aumentaba y la figura de Xabi Alonso se tornaba cada vez más frágil.
“Alonso sabe que está al borde del despido, y ni siquiera una victoria puede salvarlo”, lamentó Roncero, quien no pudo evitar mostrar su desdén por el estilo de juego del Madrid.
Finalmente, el encuentro terminó con un 2-1 a favor del Madrid, pero las críticas no se hicieron esperar.
La actuación del árbitro y las decisiones tomadas durante el partido generaron un torrente de reacciones en redes sociales y medios de comunicación.

“¿Hasta cuándo se permitirá que el Madrid goce de reglas diferentes?”, se preguntaba Roncero, mientras muchos aficionados del Alavés clamaban por justicia.
La sensación de que el Madrid había robado puntos valiosos se hizo eco en todo el país, y la figura de Xabi Alonso continuaba siendo un tema candente.
La victoria del Madrid, aunque celebrada por sus aficionados, dejó un sabor amargo en el ambiente.
Las ayudas arbitrales y la falta de justicia en el juego estaban comenzando a convertirse en una rutina, y muchos se preguntaban si esto era lo que el fútbol debía ser.
“Esto es pan para hoy, hambre para mañana”, concluyó Roncero, dejando claro que la situación del Madrid podría no ser sostenible a largo plazo.
![]()
El futuro de Xabi Alonso seguía en la cuerda floja, y la presión aumentaba con cada partido.
Mientras tanto, el Barcelona, a solo cuatro puntos del Madrid, se frotaba las manos ante la posibilidad de aprovechar cualquier desliz del eterno rival.
La jornada había dejado más preguntas que respuestas, y el mundo del fútbol esperaba con ansias el próximo capítulo de esta saga llena de drama y controversia.
El Madrid, por su parte, deberá enfrentar las críticas y la presión de sus propios aficionados, quienes esperan un juego más convincente y menos dependiente de decisiones arbitrales.
La batalla por el título continúa, y en el horizonte se vislumbran nuevos desafíos para ambos equipos.
Así, el fútbol sigue siendo un espejo de la vida misma, lleno de sorpresas, decepciones y, sobre todo, controversias que mantienen a los aficionados al borde de sus asientos.