Simeone rompe el silencio y lanza una bomba sobre el arbitraje en Barcelona-Sevilla: ‘¿Justicia o favoritismo descarado?’
La derrota del Barcelona por 4-1 ante el Sevilla en la octava jornada de La Liga no solo dejó un marcador contundente, sino que desató una tormenta mediática sobre el arbitraje del partido.
El árbitro Muñiz Ruiz fue duramente criticado, incluso recibiendo una calificación de cero por parte de una cuenta especializada en análisis arbitrales, algo que no es habitual y refleja la gravedad de sus errores.
En este contexto, Diego Simeone decidió romper su habitual discreción sobre temas arbitrales para expresar una opinión clara y contundente.
El entrenador argentino, conocido por su franqueza y pasión, mostró su profundo malestar por lo que presenció en el encuentro.

“Normalmente no hablo de los árbitros, pero lo ocurrido en el partido Barcelona-Sevilla no se puede ignorar,” comenzó Simeone con un tono que combinaba realismo y asombro.
Para él, existe un límite en la cantidad de errores arbitrales que se pueden aceptar, pero cuando estos errores se convierten en una serie de decisiones claras que favorecen a un solo equipo y afectan el resultado, “salimos del ámbito de la casualidad y entramos en la zona de la duda.”
El ‘Cholo’ fue más allá y calificó como doloroso ver a un club del peso y la historia del Barcelona enfrentarse a decisiones tan “extrañas”.
Mencionó específicamente el penalti polémico cobrado contra Araujo, las tarjetas amarillas “aleatorias” y la falta de sanción en jugadas claras antes de goles decisivos del Sevilla.
Simeone advirtió que esta situación va más allá de un solo partido o equipo.
“Cuando un club del tamaño del Barcelona es perjudicado, esto envía una señal peligrosa al resto de los clubes, que los errores arbitrales pueden ser parte del juego,” explicó.
En su opinión, esto destruye la idea de justicia y pone en riesgo el espíritu competitivo de la Liga.
El entrenador recordó que, tras años en la competición como jugador y técnico, “he visto muchos partidos difíciles, pero cuando empiezas a sentir que la justicia arbitral está ausente, el resultado pierde su significado.”
Para Simeone, el fútbol debe ser un juego equilibrado, y si ese equilibrio se rompe por decisiones arbitrales, el campeonato pierde valor.
Además, exigió una rendición de cuentas clara y estricta por parte del Comité Arbitral español.

“No basta con decir que el árbitro se equivocó. Debe haber una verdadera rendición de cuentas,” afirmó.
Pidió transparencia en el uso del VAR y en la interpretación de las reglas, denunciando que a veces estas parecen favorecer sistemáticamente a ciertos equipos.
Simeone también destacó el impacto psicológico que estas decisiones tienen en los jugadores, especialmente en los jóvenes talentos como Pedri, Gabi o Lamine Yamal.
“Imaginen a estos chicos viendo cómo su esfuerzo se desperdicia por decisiones incomprensibles,” reflexionó.
Para él, el arbitraje debería ser un factor de estabilidad, no una fuente constante de polémicas que minan la confianza en el sistema.

En su discurso, el técnico argentino hizo un llamado a la Federación Española y al Comité de Árbitros para que tomen medidas urgentes.
“El fútbol español no puede continuar así. Queremos que todos los equipos, ya sea Barcelona u Osasuna, sientan que las decisiones arbitrales no favorecen a nadie,” sentenció.
Con estas palabras, Simeone tocó un nervio sensible en el fútbol español, poniendo en evidencia una problemática que va más allá de un solo partido o resultado.
Su denuncia sobre la integridad competitiva de La Liga abre un debate que podría tener consecuencias importantes para el futuro del campeonato.
Mientras tanto, el Barcelona intenta superar la derrota y seguir adelante bajo la dirección de Hansi Flick, quien también se mostró crítico con el arbitraje pero defendió el espíritu de lucha de su equipo.

Por otro lado, el Sevilla celebra un triunfo contundente que reafirma su buen momento en la temporada.
En definitiva, la intervención de Simeone añade un nuevo capítulo dramático a la crisis arbitral que sacude a La Liga.
Sus palabras no solo reflejan la frustración de un rival directo, sino que ponen en jaque la credibilidad del sistema que regula el fútbol español.
¿Responderá la Federación a estas críticas?
¿Habrá cambios reales en el arbitraje?
La temporada sigue su curso, pero la voz del ‘Cholo’ ha dejado claro que la paciencia se está agotando y que la justicia en el fútbol debe prevalecer para salvar la pasión y la competencia que tanto aman los aficionados.