“Creo en Dios y Él me va a fortalecer para soportar esta pena tan grande”.

Esa frase resume el sentimiento que rodea a muchas de las historias más dolorosas vinculadas a Pasión de gavilanes, una de las telenovelas más exitosas de la historia de la televisión latinoamericana.
La producción fue líder de audiencia en países como Venezuela, Colombia, Chile, Panamá, Puerto Rico y hasta en lugares tan lejanos como Bulgaria, Serbia, Rumania, Rusia, China e Israel.
Su intensa historia de amor, los giros dramáticos y la fuerza de su elenco la convirtieron en un fenómeno mundial.
Sin embargo, detrás del éxito, el tiempo también trajo despedidas.
Varios actores que formaron parte de esta emblemática telenovela fallecieron, y muchos seguidores desconocen sus historias.
Hoy repasamos quiénes fueron y cómo se apagaron algunas de las figuras que marcaron a toda una generación.

Liliana Lozano Garzón fue una de las muertes más impactantes relacionadas con el elenco.
La actriz y reina de belleza fue encontrada sin vida en una zona rural de Colombia.
Junto a su cuerpo apareció el de Fabio Vargas Vargas, hermano del reconocido narcotraficante Leonidas Vargas.
El crimen conmocionó al país y generó múltiples versiones.
Liliana había iniciado su carrera como modelo y en 1994 fue coronada Reina del Bambuco.
Ese mismo año comenzó a aparecer en televisión, pero su gran salto a la fama llegó en 2002 con Pasión de gavilanes.
Gracias a ese papel obtuvo reconocimiento nacional e internacional.
Posteriormente participó en producciones como La familia Echeverry, Infieles anónimos, Así es la vida, Amor de mis amores y Marido a sueldo.
Su última aparición fue en 2008 en la telenovela La dama de Troya.

Sus amigos la recuerdan como una mujer sencilla, cariñosa y sin malicia.
Siempre aseguraron que nunca tuvo vínculos con el narcotráfico.
Según ellos, su único error fue enamorarse de la persona equivocada.
En la Navidad de 2006, Liliana conoció a un hombre que se presentó como Daniel Felipe Santamaría Valencia.
Decía ser un empresario con negocios en varios países.
Marilyn Patiño, actriz y amiga cercana, relató que este hombre colmó a Liliana de regalos, viajes, un apartamento de lujo y un vehículo de alta gama.
La relación avanzó rápidamente, pese a la diferencia de edad.
Tiempo después, él le confesó su verdadera identidad.
Su nombre real era Fabio Vargas, hermano de Leonidas Vargas.

Aunque impactada, Liliana decidió continuar la relación.
Tras tres años juntos, la pareja terminó en la Navidad de 2008.
A comienzos de 2009, Liliana se enteró del asesinato de Leonidas Vargas en Madrid.
Movida por el afecto, contactó a su expareja para darle el pésame.
Al día siguiente decidieron encontrarse en el Valle del Cauca.
Versiones extraoficiales señalan que ambos llegaron desde España y se dirigieron a una finca.
Allí, hombres armados irrumpieron en la vivienda y los asesinaron brutalmente.
Una tragedia que jamás debió ocurrir.
Otro nombre inolvidable es Julio del Mar.
Desde muy joven mostró interés por el teatro y a los 13 años ingresó a la Escuela de Teatro de Bogotá.
Su carrera lo llevó a México y España, experiencias que enriquecieron su formación artística.

En los años 80 se estableció definitivamente en Colombia.
Julio del Mar participó en importantes producciones como Escalona, La viuda de Blanco y Pasión de gavilanes.
En sus últimos años sufrió graves problemas de salud tras un accidente cerebrovascular.
Falleció en 2019, a los 75 años, solo en su apartamento en Bogotá, tras sufrir un infarto.
Su partida dejó un profundo vacío en la televisión colombiana.
Ever King, recordado por su papel de Hersock Vargas, también forma parte de esta lista.
El actor falleció a los 55 años tras sufrir un infarto.
Nacido en Santa Marta, estudió arte dramático en Inglaterra antes de regresar a Colombia.
Su carrera fue extensa y sólida.
Participó en producciones como Pedro el escamoso, Pasión de gavilanes, La tormenta, El capo, Sin senos no hay paraíso, Bella calamidades y Tres Caínes.
También formó parte de la película Loving Pablo, junto a Javier Bardem y Penélope Cruz.

Su muerte fue lamentada profundamente, especialmente por su sobrino, el futbolista Radamel Falcao, quien lo despidió con un emotivo mensaje.
Fernando Corredor Muñoz fue otro de los actores que dejó huella.
Con más de 50 años de trayectoria en teatro, cine, radio y televisión, falleció en 2016.
Un accidente de tránsito lo llevó a cuidados intensivos tras ser atropellado por una motocicleta.
Pese a una cirugía craneal, no logró sobrevivir.
Participó en Pasión de gavilanes, Escobar, el patrón del mal, Oye bonita y Sin tetas sí hay paraíso.
Sebastián Boscán, quien interpretó a Leandro Santos, falleció en 2021 a los 41 años.
Su personaje era cercano a Oscar Reyes y tenía gran presencia en la historia.
El actor murió tras una dura batalla contra un cáncer de estómago.
Su fallecimiento sorprendió al público, ya que era un hombre joven y lleno de vida.

Por último, Raúl Gutiérrez, quien dio vida a Jaime Bustillo, también partió.
Falleció el 25 de julio de 2020 a los 64 años tras enfrentar una enfermedad terminal.
Además de actor, fue un reconocido narrador y actor de doblaje.
Trabajó durante más de tres décadas en televisión, teatro, radio y doblaje.
La Asociación Colombiana de Locutores confirmó su fallecimiento y lo recordó como un maestro y un amigo entrañable.
Pasión de gavilanes no solo dejó una huella imborrable en la televisión.
También dejó historias humanas marcadas por el talento, el éxito y, en muchos casos, la tragedia.
Hoy, estos actores viven en la memoria de quienes los vieron brillar en pantalla.