Olivia Michel Ramírez, una de las actrices más emblemáticas del cine mexicano, nació el 20 de marzo de 1941 en Colima, Colima.
Desde temprana edad, mostró un interés por las artes, lo que la llevó a estudiar decoración de interiores.
Sin embargo, su verdadera pasión se encontraba en la actuación.
Para perseguir este sueño, se inscribió en la Academia de Andrés Soler, donde perfeccionó su talento durante tres años.
Posteriormente, continuó su formación bajo la tutela del director de teatro Seki Sano, quien la ayudó a cimentar su carrera en el mundo del espectáculo.
Su debut cinematográfico llegó en 1955 con la película “Y mañana seremos mujeres”, donde compartió créditos con reconocidos actores como Rosita Arenas y Roberto Cañedo, marcando el inicio de una prolífica carrera.
Durante la época de oro del cine mexicano, Olivia Michel se destacó por su versatilidad y talento en la actuación.
A lo largo de su carrera, participó en más de 40 películas, consolidándose como una figura relevante en la industria del entretenimiento.
Su trabajo en cintas como “Museo del horror”, “Historia de un canalla”, “La sombra de los hijos” y “Manicomio” evidenció su capacidad para interpretar diversos personajes, lo que la convirtió en una actriz apreciada por el público y la crítica.
Además de su éxito en el cine, también hizo apariciones en televisión a finales de los años 60 y se destacó en el teatro, lo que la llevó a ser reconocida como una artista integral.
Olivia Michel también es conocida por su relación con el escritor y guionista argentino José María Fernández Unsaín, quien era 23 años mayor que ella.
La pareja se conoció en 1959 y contrajo matrimonio después de que Fernández Unsaín se divorciara de su primera esposa.
Juntos procrearon a su único hijo, José María Fernández Michel, conocido como “El Pirru”.
A pesar de su éxito profesional, su vida personal estuvo marcada por controversias.
Su hijo ha estado en el centro de atención mediática debido a sus romances con actrices y cantantes, como la fallecida Mariana Levy y la famosa Ana Bárbara, quien se convirtió en su nuera.
Sin embargo, la relación entre Olivia y su hijo no ha sido del todo armoniosa.
En un tuit polémico, la actriz Carmelita Salinas acusó a “El Pirru” de despojar a su madre de la mansión donde vivía, vendiéndola y quedándose con el dinero.
Además, se mencionó que la había ingresado en la casa del actor de Televisa, dejándola en total abandono y sin recibir visitas.
Esta situación ha generado un gran revuelo en los medios y ha llevado a que Olivia sea catalogada como una madre desamparada, lo que contrasta con la imagen que había construido a lo largo de su carrera.
A pesar de los altibajos en su vida personal, Olivia Michel continuó su carrera en el mundo del espectáculo.
En la década de los 80, comenzó a escribir guiones cinematográficos y obras teatrales, mostrando su versatilidad como artista.
Su trabajo fue reconocido en 1986 cuando fue nominada al Premio Ariel en las categorías de Mejor Guion y Mejor Argumento Original por la película “Mexicano ¡Tú puedes!”, dirigida por José Estrada.
Este reconocimiento consolidó su posición no solo como actriz, sino también como una talentosa escritora, ampliando su legado en la industria del cine y el teatro.
Actualmente, Olivia Michel vive en la casa del actor, donde ha encontrado refugio y apoyo entre sus compañeros de profesión.
A pesar de su éxito y talento, su vida personal sigue marcada por la ausencia de su hijo, quien no la visita desde hace tiempo.
Sin embargo, Olivia continúa viviendo de manera tranquila, rodeada de recuerdos de su carrera y de los grandes momentos que ha vivido en el mundo del espectáculo.
Su historia es un testimonio de la resiliencia de una mujer que, a pesar de las adversidades, ha sabido mantenerse firme en su pasión por la actuación y la escritura, dejando una huella indeleble en el cine mexicano.